La Beata Nazaria Ignacia March Mesa. Foto: Internet.
La Paz, 29 de enero (ANF).- Las Misioneras Cruzadas de la Iglesia se encuentran gozosas por la santificación de Nazaria Ignacia, la primera santa de Bolivia. Recuerdan su misión en Bolivia, su espíritu solidario y destacan que la religiosa creó una Congregación que ahora tiene presencia en 20 países, donde se replica su obra.
“Es una alegría que madre Nazaria Ignacia sea reconocida por su ejemplo y su testimonio de vida como Santa. Todas estamos recibiendo esta noticia que es gozosa, no solamente para las misioneras, sino para toda la Iglesia en Bolivia, que ha visto nacer el testimonio de Nazaria Ignacia, porque ella llega a Bolivia a sus 22 años como miembro de las hermanas del asilo de ancianos y aquí recibe el llamado del Señor para ser misionera y llevar su palabra más allá de las fronteras”, sostuvo la Hermana Cilenia Rojas, de las obras misionales pontificias.
Rojas explicó que la Santa Boliviana si bien nació en España en 1889, a su 22 años llegó a Bolivia donde plasmó su espíritu solidario a través de diversas misiones enfocadas en ayudar a los más desposeídos, principalmente los huérfanos de la Guerra del Chaco y otra población, como gente de escasos recursos, ancianos, mujeres y otros. Asimismo fundó la Congregación "Misioneras Cruzadas de la Iglesia" en 1925.
“Ella funda la primera Congregación Misionera en Bolivia en el año 1925, después de una reflexión que Dios le pide que haga en su vida. El sentido misionero era grande y universal, lo más bonito es que funda la Congregación Misionera. Ahora las hermanas continúan la obra, la Congregación está extendida a 20 países de cuatro continentes, eso es un don grande para Bolivia y nuestra Iglesia a nivel universal”, explicó.
Rojas detalló que la Congregación está presente además de Bolivia, en Argentina, Brasil, Uruguay, Perú, Colombia, Cuba, México, Guatemala, El Salvador, Honduras, India, El Congo, Camerún, Guinea, Francia, España y otros países, mediante obras no solo sociales si no de evangelización, con el objetivo de “llevar la buena noticia a los hermanos del mundo entero”, mencionó.
La Hermana comentó que desde muy temprana edad la opción de Nazaria Ignacia fue por los pobres. Una de las obras que perdura en Oruro, la ciudad donde más tiempos estuvo presente y donde se tiene la casa de las misioneras, es la experiencia de lo que se llamó “la olla del pobre” para los que menos tenían, además de crear el Primer Sindicato Obrero Femenino, con sus primeros estatutos, experiencia pionera no solo para Bolivia sino para América Latina. También casas de acogida para mujeres y refugios para niños.
“Es considerada la primera Santa boliviana, porque ella tuvo una pasión tan grande por Bolivia, que asume una identidad. Ella muere muy joven porque realiza su misión en el altiplano y su salud se deteriora. Nunca quiso salir de Oruro ni de Bolivia, muere en Argentina pero se traen sus restos a Oruro, porque lo que significaba Bolivia para ella”, comentó la religiosa.
El Papa Francisco aprobó la canonización de la Beata Nazaria Ignacia March Mesa, que fundó la Congregación "Misioneras Cruzadas de la Iglesia" en 1925. Pese a que nació en España, se la considera como la primera Santa boliviana.
Nazaria con la autorización de los Obispos de Oruro y La Paz, fundó la Congregación religiosa diocesana de las Hermanas Misioneras de la Cruzada Pontificia, instituto religioso que se fundó en 1925 y se erigió canónicamente el 12 de febrero de 1927.
La Beata falleció el 6 de julio de 1943 en Buenos Aires, Argentina, y un año más tarde se aprobó la constitución definitiva de la congregación y recibió el nombre de Misioneras Cruzadas de la Iglesia.
El 27 de septiembre de 1992, el Papa Juan Pablo II beatificó a Nazaria Ignacia y la Iglesia Católica de Oruro, y se decidió que su fiesta se celebraría el 6 de julio de cada año. Asimismo, se prosiguió con los trámites para la canonización o declaración como Santa, algo que será una realidad tras obtener la venia de Francisco.
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