Servicom realiza estudios de complementación. Fotos: Álex Villca
La Paz, 11 abril (ANF).- La empresa Servicom, contratada por la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) ingresó al estrecho de El Chepete y se dirigirá al Bala para realizar estudios geotécnicos complementarios, para ejecutar los megaproyectos hidroeléctricos que inundarán a aproximadamente 771 kilómetros cuadrados de la Amazonía. Esta nueva incursión puso en situación de emergencia a las comunidades indígenas.
La información fue proporcionada a ANF por el vocero de la Coordinadora Nacional de Pueblos Indígenas para la Defensa de los Territorios y Áreas Protegidas (Contiocap), Álex Villca, quien denunció la insistencia del Gobierno por ejecutar estos megaproyectos a pesar que estudios advierten su inviabilidad, económica, financiera, social y ambiental.
“Una pequeña comisión de la Mancomunidad de Comunidades Indígenas de los ríos Beni, Tuichi y Quiquibey se trasladó hoy (jueves) hasta el angosto de El Chepete y pudo verificar el traslado de dos perforadoras, dos pontones grandes, además de otras pequeñas embarcaciones que trasladaron a unas 20 personas (…). Lamentablemente estaban acompañados por algunos hermanos indígenas inducidos por el Gobierno”, señaló a ANF.
Según el líder amazónico, estos últimos sucesos ponen en situación de emergencia a la Coordinadora, que asumirá determinaciones de resistencia en una reunión en Cochabamba.
Recordó que los propios estudios de impacto ambiental de Geodata estiman una inundación en El Chepete de una superficie de 677 kilómetros cuadrados de bosque amazónico en una de las regiones más biodiversas de Bolivia y el mundo, y en El Bala de aproximadamente 94 kilómetros cuadrados. Los dos proyectos impactarían de manera directa en el Parque Madidi y en la reserva de Pilón Lajas.
Villca lamentó que el Gobierno persista con estos megaproyectos hidroeléctricos al autorizar el ingreso de ENDE y Servicom al mismo sitio donde Geodata ya realizó estudios geotécnicos y perforaciones el 2016, para medir la resistencia de las rocas de la zona.
El vocero indígena dijo que lo acontecido merece una profunda reflexión, pues el Gobierno en su afán de ejecutar megaobras inviables económica, social y ambientalmente, se vale de estrategias de cooptación de dirigencias, como la de la Central de Pueblos Indígenas de La Paz (CPILAP) que acompañó hasta El Chepete a la delegación gubernamental.
“Los hermanos que estaban acompañando a los técnicos de ENDE y Servicom al verse sorprendido por nosotros se alejaron avergonzados (…). Tratamos de entenderlos que su necesidad económica a veces les lleva a tomar este tipo de decisiones”, sostuvo.
El ingeniero, Jesús Villarreal de Servicom, durante la visita de la comitiva confirmó que la empresa contratado por ENDE realiza estudios geotécnicos complementarios. Precisó que el trabajo de campo en El Chepete será de 60 días y otros 30 días en El Bala.
“ENDE ha visto que hay que complementar estudios geotécnicos; las condiciones del terreno son relativamente estables, pero no sabemos que hay en el subsuelo, hay que ver si hay discontinuidad, fracturamiento, una serie de dificultades que impedirían que la obra sea segura, y eso estamos investigando”, explicó.
Villarreal explicó que la mano de obra especializada la ofrece la empresa, así como técnicos en perforación e ingenieros, en tanto que el apoyo logístico fue contratado entre los comunarios locales. “El transporte, la provisión de víveres están a cargo de los comunarios también”, indicó.
De acuerdo a estudios a los que accedió la Fundación Solón, las hidroeléctricas de Rositas, Cachuela Esperanza, El Chepete y Bala dejarán bajo agua 2.000 kilómetros cuadrados de bosque y tierras fértiles.
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