Jubileo cuestiona intención de sacrificar parques naturales en un mercado incierto del gas

“Queremos sacrificar parques naturales, lugares con un patrimonio natural enorme en un contexto de incertidumbre, no se ha tratado el tema fiscal para saber el mejor uso. Pero sería lamentable que hayamos ingresado a un parque natural para extraer hidrocarburos y la renta que se reciba sirva para canchas de césped sintético, ese es un sin sentido”, afirmó el investigador en temas energéticos, Raúl Velásquez. 

En análisis del experto en hidrocarburos, también los anuncios desde el Gobierno, que se posterga el contrato de San Thelmo ante el rechazo de las comunidades campesinas que habitan Tariquía, pero luego vuelve a reactivar el proyecto, generan incertidumbre tanto en las petroleras privadas como en la propia población afectada.

Velásquez dijo que no solo queda en duda la seriedad del Ministerio de Hidrocarburos y YPFB, sino también del Ministerio de Medio Ambiente y Agua, encargado de emitir las licencias ambientales para proyectos extractivistas, así como del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap) señalada de haber rezonificado de mala fe Tariquía para permitir actividades de exploración y explotación hidrocarburífera.

En análisis del experto llama la atención que en noviembre y diciembre del año pasado, de acuerdo a la información de la Secretaria de Hidrocarburos de la Gobernación de Tarija se habría exportado cerca apenas 9 Mmmc/d al mercado argentino cuando se debió haber enviado en promedio 17 Mmmc/d. 

“El Presidente de YPFB (Óscar Barriga) anunció $us 450 millones en exploración, lo que representa un 31% de la inversión total programada para este año, es un monto importante y representa un incremento del 20% en relación al 2018, pero si compara con las inversiones de 2015 -año que se alcanzó mayor producción- lo programado es 20% menos de lo ejecutado del 2015  y 40% menos de lo presupuestado el 2015”, sostuvo.

Barriga anunció además continuar con una "política agresiva" de exploración no solo en zonas tradicionales, sino también en las no tradicionales como la Cuenca Madre de Dios en la Amazonía boliviana.

Más allá que llaman la atención las cifras anunciadas, dijo que es posible esta caída debido a que el 2015 Bolivia exportaba a Brasil los máximos volúmenes contraído de 30 Millones de metros cúbicos día (Mmmc/d) en promedio, y se cumplía cabalmente con los envíos a Argentina tanto en periodo de verano como en invierno”.

“Ante el escenario de buenos mercados había buenas expectativas de inversión tanto por parte de las subsidiarias de YPFB como por parte de las empresas prestadoras de servicios”, señaló.

El experto dijo que se debe considerar el nuevo contexto de los mercados para el gas, donde el principal comprador Brasil está en proceso de renegociación con Bolivia en cumplimiento a las cláusulas del contrato de hace 20 años, cuando se preveía las conciliaciones de gas pagado pero no recibido y de aquellos remanentes comprometidos que tampoco se pudo cumplir a cabalidad e el primer periodo del contrato.

Sin embargo dijo que la situación que sucede con el mercado argentino también es de preocupación debido a que el vecino país anunció su intención de ampliar el contrato hasta el 2030 pare recibir menores volúmenes de gas en un periodo más largo debido a la fase de producción que ingresó el gigante yacimiento de gas no convencional de Vaca Muerta, y que actualmente se convirtió en una fuente de exportación.

“Sigue la tendencia de exportar desde Vaca Muerta y se habla de construir un gasoducto desde este yacimiento de gas no convencional al noreste argentino, que era el mercado potencial de Bolivia”,  mencionó.

Advirtió que la capacidad productiva de hidrocarburos bajó al 60% en los meses más bajos de envíos que fueron noviembre y diciembre del año pasado, y al 85% de su capacidad promedio en términos anuales.

/JMC/