La Paz, 23 de septiembre (ANF).- La imagen de él sin su pico y con claras señales de sufrimiento y horas de agonía conmocionó a todo un país. Tuki Tuki, el tucán que fue intervenido quirúrgicamente tras ser rescatado luego de sufrir una grave mutilación, hoy ha muerto y con esto resurge el debate de la actual situación de los animales silvestres en Bolivia y de la insensatez y violencia del ser humano.
Tuki Tuki sólo buscaba alimento. Sucedió el fin de semana. Comía fruta en una estancia de la región de Puerto Quijarro (Santa Cruz), pero personas del lugar, que aún no han sido identificadas, lo apedrearon hasta romperle el pico y el ala.
Y luego entre los árboles se escuchó un chillido de agonía similar a la de una gallina al ser asesinada. Tuki Tuki estaba en el suelo y a centímetros, su pico y los rastros de sangre.
Fue hallado en un estado de estrés, shock y cardiomiopatía. Los Guardianes del Pantanal lo rescataron y trasladaron a Roboré para darle atención médica.
Veterinarios y un odontólogo lo operaron y lograron colocarle el pico. Y en medio de la atención de la población, se informó que estaba estable y que podría mejorar, pero la agonía de Tuki Tuki tuvo su fin y murió.
Y el país se movilizó en redes mostrando indignación y sensibilidad con este hecho, que se suma a miles de denuncias de maltrato y asesinatos a animales silvestres en Bolivia.
“Diría que casos como el tucán Tuki Tuki muestran que existen problemas culturales y políticas profundas en cuanto a la protección de la fauna silvestre en Bolivia. Lo más preocupante es que estos casos solo son el punto del iceberg”, afirmó a ANF el biólogo e investigador Vincent Vos.
El experto asegura que a esto se suman las tasas de deforestación, los enormes incendios y la contaminación minera, “que en la práctica significan que literalmente millones de animales silvestres en Bolivia sufren incluso más que este tucán y que Bolivia es uno de los países con mayor pérdida de biodiversidad del mundo”.
La imagen de Tuki Tuki copó las redes sociales con llamados de conciencia, indignación y pedidos de dar con los responsables de este y cientos de hechos de maltrato animal.
“Tuki Tuki, un ser vivo indefenso y adorable de la naturaleza, lastimosamente fue brutalmente estropeado por sus adversarios, hasta lograr romperle el pico, ello denota la miseria humana en lo que nos hemos convertido, seres alejados y desconectados totalmente de la madre naturaleza”, repudia el activista y líder indígena, Alex Villca.
Esta muerte llega a días en que un reciente informe del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) establece que el mundo perdió más de dos tercios de la fauna silvestre en menos de 50 años y las zonas tropicales de América Central y del Sur son las más afectadas con una merma del 94%.
Sumado a esto, se registran incendios en varias regiones que obligan a los animales silvestres a huir y buscar su resguardo. Muchos de ellos tienen el castigo de llegar a sitios donde personas violentas los agreden y violentan sobre esa condición vulnerable por la que atraviesan.
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