La Paz, 3 de noviembre (ANF).- Policías y gendarmes argentinos impidieron a la comunidad boliviana de ese país celebrar Todos Santos en el cementerio de Flores, ubicado en Buenos Aires, con comida y música.
“Contrariando las tradiciones, gendarmes y policías los requisaron para impedir que entraran con instrumentos y alimentos. (E incluso) a un fotógrafo también le impidieron registrar ese momento”, reportó “Página 12”.
Algunos testigos del hecho, entre ellos ciudadanos argentinos, calificaron el accionar de los funcionarios de xenófobo y además reconocieron que los bolivianos acuden al cementerio cada 1 y 2 de noviembre para honrar a los muertos.
En algunos cementerios de Bolivia también se realizan controles estrictos en el ingreso a los cementerios, principalmente en las ciudades capitales, y no se permite el ingreso de algunos productos, como bebidas alcohólicas.
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