La Paz, 15 de agosto (ANF). – Las ciudades de La Paz y El Alto atraviesan por una escasez de productos de primera necesidad debido a los bloqueos protagonizados por afines al Movimiento Al Socialismo (MAS) en las carreteras desde hace más de 10 días y que se mantienen por decisión del cabildo realizado ayer en la ciudad de El Alto, por organizaciones campesinas de las 20 provincias de La Paz. Esa situación comenzó a afectar a los hospitales de ambas urbes que se quedaron sin alimentos para los pacientes y médicos, denunció anoche el secretario ejecutivo del Sindicato de Ramas Médicas de la Salud Pública (Sirmes) de La Paz, Fernando Romero.
Romero explicó que el problema no solo afecta a los establecimientos de salud de las ciudades, sino también en las áreas rurales, donde afirma que también se están quedando sin alimentos, a eso se suma la escasez de oxígeno medicinal que tampoco llega debido a las protestas de varios sectores sociales, aunque ayer la Central Obrera Boliviana (COB) instruyó suspender las movilizaciones declarando un cuarto intermedio hasta el 18 de octubre.
“El Sirmes ha recibido denuncias de la ciudades y áreas rurales, el día de hoy no solo no tenemos oxígeno para nuestros pacientes, sino que además nos estamos quedando sin alimentos en los centros de salud y hospitales”, afirmó el galeno.
Desesperados por esa crisis, Romero agregó que decidieron “restringir” la alimentación al personal de médico para priorizar la nutrición de los pacientes hospitalizados y así evitar complicaciones en su salud.
“Ante esa situación, hemos tenido que llegar al sacrificio de restringir la alimentación al personal de salud que hace turno. Pese a que hace más de cuatro meses tienen una tarea dura de atender a la población, sin ninguna ley que nos resguarde, sin cobertura de salud y hoy en día hemos tenido que dar un paso más de sacrificio que es limitar la alimentación a los médicos”, afirmó.
Uno de los nosocomios que sufre por la escasez de alimentos, según el Sirmes La Paz, es el Hospital Boliviano Holandés, que por la carencia de productos de primera necesidad se vieron forzados a suspender de forma temporal el comedor destinado para los salubristas y racionar sus pocos alimentos a los pacientes internados en ese nosocomio.
Romero dijo que los bloqueos encabezados por la COB y ahora por las organizaciones de las 20 provincias de La Paz constituyen en un atentado contra la vida y salud de los enfermos y ahora, contra el sector médico.
“Nos da un dolor muy grande, que para el MAS y la COB les valga tan poco el sistema de salud. Hoy nuestra enorme preocupación son los alimentos, en unas horas se acaba la alimentación para nuestros pacientes. Ya es hora de terminar esto y de exigir, presionar que nuestros pacientes no tengan que padece hambre y que nuestro sector no tenga que dejar de alimentarse para sostener un centro”, aseveró.
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