La Paz, 19 de diciembre (ANF).- La Fundación CNV Internationaal observó que el conflicto post electoral dejó en la incertidumbre a la Central Obrera Boliviana (COB) y a las otras organizaciones sindicales departamentales, en cuanto a sus relaciones y alianzas con el Movimiento Al Socialismo (MAS), ex partido de gobierno, de cara a las próximas elecciones presidenciales.
“La COB tendrá que analizar si sus candidatos se mantienen y con mucha más calma, ver si la alianza política continúa en las próximas elecciones convocadas por el Gobierno de Transición actual, para las primeras semanas de 2020”, manifestó Arnaldo Montero, representante de CNV en Bolivia, organización vinculada a la confederación nacional de sindicatos CNV de Holanda, que busca promover los derechos y las responsabilidades de los trabajadores en Latinoamérica.
El conflicto político y social que vivió Bolivia tras la celebración de los comicios generales tuvo enorme repercusión a nivel internacional. Las denuncias de fraude electoral y la posterior renuncia y salida del país del expresidente Evo Morales provocaron cambios importantes a nivel político que afectaron distintos ámbitos, entre ellos los sindicatos.
La organización advirtió “la situación incómoda” en la que quedaron muchos dirigentes/candidatos de los trabajadores, quienes fueron electos en las elecciones que fueron tachadas como fraudulentas.
En palabras de Vitaliano Mamani, quien fue entrevistado por la CNV mientras fungía como Secretario de Organización de la COB y poco antes de ser posesionado como Viceministro de Trabajo, se espera que los partidos políticos inicien un proceso de rearticulación de cara a las próximas elecciones.
“La COB, por principio, es pluralista. Esperemos que ahora que se nombren a los nuevos vocales electorales, tendremos fecha para las nuevas elecciones y los trabajadores nos organizaremos”, anticipó el exdirigente cobista.
Durante gran parte de los 14 años de su gobierno, el MAS logró una alianza estratégica con la principal organización de los trabajadores. Ello le significó reiteradas críticas por su afinidad al partido de gobierno. Los réditos repercutieron obras en favor de la COB y candidaturas al Legislativo para sus dirigentes.
Para Mamani, las actuales circunstancias imposibilitan que sus representantes ocupen sus curules en el parlamento debido a la anulación de los comicios que fueron observados por irregulares y posteriormente anuladas por una ley.
El sector salud con temas pendientes
Por su parte, la representante de la Red de Mujeres y Trabajadoras Sindicales de Bolivia, Sofía Ríos, aseguró que el impacto del conflicto post electoral fue muy fuerte en el ámbito de la salud.
“A tal extremo se ha llegado, que no teníamos oxígeno ni alimentos para los pacientes. Se ha llegado a destruir centros de salud y hospitales. Gente movilizada ha ido a estrellarse contra estas instituciones públicas, que están al servicio de la población”, manifestó la dirigenta que aclaró que las protestas de su sector no eran recientes, sino que comenzaron mucho antes en demanda de mejores condiciones laborales tras la implementación del Seguro Único de Salud (SUS) y su inclusión en la Ley General del Trabajo.
“De hecho, nosotros estamos de acuerdo con esa ley, pero las condiciones no están dadas, tiene un bajo presupuesto, bajo equipamiento. En salud no se ha invertido, prácticamente. Seguimos con un presupuesto bajo, menor al de las Fuerzas Armadas o el Ministerio de Comunicación”, agregó.
Ríos ve con buenos ojos que el expresidente del Colegio Médico de Bolivia haya sido nombrado como Ministro de Salud, dado que él también estuvo encaramado en las luchas de su sector.
“Él está de acuerdo en iniciar reuniones para evaluar las peticiones. El Colegio Médico plantea la realización de un diálogo nacional en el que se pueda explicar todas las demandas del sector y las referidas a un mayor beneficio de los pacientes”, dijo.
Perspectivas alentadoras
Según el análisis del representante de CNV Bolivia, pese al conflicto post electoral, las perspectivas de los trabajadores en el país son alentadoras, ya que “si bien la última y fallida experiencia electoral ocasionó profundas heridas, las estructuras sociales, como las centrales obreras departamentales y la misma COB, han mantenido su unidad”.
“Dichas organizaciones persisten en la búsqueda de mejores condiciones socio - laborales para sus afiliados, independientemente de qué partido tome el poder en las nuevas elecciones el 2020. De igual modo, se espera que los espacios de Diálogo Bi y Tri Partito, se reactiven inmediatamente luego de las nuevas elecciones”, mencionó Montero.
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