ANF A3459 19:01:41 04-10-2002INT SANTA CRUZ-SENADO-MNR-MASSenador emenerrista evitó ir a los golpes con uno del MAS por "respeto a una persona mayor"Santa Cruz, Oct. 4 (ANF).- Los años de vida y no los de dirigente sindical del senador por el MAS, Filemón Escóbar, fueron considerados por su colega emenerrista, Joaquín Monasterio, quien argumentó esta razón para no arremeter a golpes contra un congresista de la oposición, a pesar de que este último se le había acercado desafiante por diferencias surgidas en una sesión realizada el pasado jueves. "Los (senadores) del MAS habían llegado tarde a la sesión, él (Escóbar) me insultó y me provocó, me desafió a pelear, yo rechacé, pero cabalmente en el momento del diálogo, él se levantó de su curul, vino hacia el mío y me desafió a pelear, pero por supuesto que no accedí. El no me iba a aguantar dos manazos y yo no iba a levantar la mano contra una persona mayor", sostuvo.El amago de pugilato entre el senador emenerrista y del MAS se originó en la decisión del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada al observar cuatro proyectos de ley y devolverlos para que sean tratados desde "fojas cero", desechando así todo el trabajo que habían realizado ambas Cámaras en la anterior Legislatura. Pese a ello, el Senado aprobó una resolución ordenando que estos cuatro proyectos sean devueltos a la Cámara Baja para que sean redactados nuevamente. Escóbar reaccionó de inmediato y acusó a los senadores de la coalición de actuar no sólo en complicidad por no convocar a los senadores del MAS para la votación, sino que también los acusó de violar la Constitución y recordó a dos ex dirigentes miristas de haber obtenido bonanza económica gracias al trabajo político pero en contra de los intereses nacionales.Según Monasterio, el Senado cumplió con todos los pasos procedimentales pese a que los senadores del MAS no se encontraban porque simplemente llegaron tarde a la sesión y no a la hora acordada. El senador emenerrista relató que Escóbar reveló una reacción violenta contra el pleno del Senado, situación que no se pudo controlar pese a que la Presidenta, Mirtha Quevedo, le había pedido cordura reiteradas veces. El enojo del senador del MAS fue tal, que, según el senador emenerrista, incluso trató mal a una funcionaria del Senado que se le acercó con un vaso con agua para que se calmara. "La injurió y la calumnió, ahora ¿qué podemos esperar?", cuestionó. (SLG)
@@PUBBLIX2