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Economía

Ley INRA debe hacer cumplir principio: "la tierra es de quien la trabaja".

ANF a0066 12/05/2006 15:18:56 ECO TIERRAS-PRINCIPIO-INRA. Ley INRA debe hacer cumplir principio: "la tierra es de quien la trabaja". La Paz, 12, MAYO, (ANF).- El Gobierno está empeñado en profundizar los alcances de la Ley del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), para hacer cumplir el principio básico de a Constitución y de la Ley de Reforma Agraria de hace 50 años, que establece que "la tierra es de quien la trabaja". Pero, a decir del director de la Fundación Tierra, Miguel Urioste, al Gobierno le costará encontrar soluciones fáciles que la "desentrampen" de la maraña jurídica a la que ha sido sometida durante los 10 años de su existencia. El objetivo principal de las modificaciones en la Ley y de la promulgación de ocho decretos referidos al tema tierra, es tener un control de las tierras del país, revertir y expropiar las grandes extensiones ociosas de manos de terratenientes y poder repartirlas a la gente que lo necesita para hacerla producir. Pero a lo largo de los últimos 10 años, la Ley INRA ha sufrido golpes de timón que la han hecho apartarse del principio básico que tenía, de que la tierra es para producirla, consignados originalmente en la Constitución Política del Estado (CPE) y la Ley de Reforma Agraria de 1953. Según Miguel Urioste, se ha creado una total inseguridad jurídica que ahora es difícil demostrar el cumplimiento de la Función Económica y Social (FES) de la tierra; se ha dado un origen turbio del derecho-propietario; se han normado tributos irrisorios de las propiedades dentro de la Ley 843; los organismos empresariales son quienes cobran por estos tributos; no se ha concluido el proceso de saneamiento, entre otros problemas. "En las dictaduras se otorgaron tierras de manera ilegal, por favores políticos. De la misma manera actuó el MNR cuando estaba en el gobierno. Sobre todo estas concesiones se hicieron en el oriente porque eran territorios fiscales. Collas, cambas y chapacos recibieron tierra y se comprometían a hacer inversiones y trabajar la tierra en plazo de mínimo de dos años", recordó Urioste, quien participó de la redacción de la Ley INRA de 1996. Pero han pasado décadas y se puede verificar que en el oriente hay enormes superficies que no estaban trabajadas y todas las tierras tienen dueño. Para Miguel Urioste, de aquí el Estado empieza a tener una enorme dificultad para recuperar esas tierras. Cuando estos dueños quieren hacer ver que están cumpliendo la ley, demuestran que ha hecho algunas obras, han deforestado, o han alambrado sus terrenos. Pero la verdad es que han trabajado un pequeño espacio pero la mayoría está sin trabajar", reconoció el director de Tierra. Por otro lado, la gente que recibió tierras gratuitas, se las ha ingeniado para hacer escritos, actas notariadas, además de corromper a los jueces o coimear a los miembros del Consejo Agrario. Miguel Urioste manifestó que el objetivo de la Ley INRA es modernizar la Reforma del 53, acelerar la reforma agraria, eliminar el latifundio y sanear las tierras. Para este fin, se creo un proceso para legitimar el derecho propietario, llamado "saneamiento" que es técnico (revisión de las coordenadas que están inscritas en titulo de propiedad) y jurídico (verificación de la legitimidad del título). Al respecto, se han encontrado miles de títulos con firmas falsas hasta de los presidentes del país. "Esta es la maraña que se ha legitimado. La Ley INRA de 1996 nació para poner orden; pretendía impulsar el saneamiento para corregir este drama. Pero en 10 años, con una inversión de 80 millones de dólares de la comunidad internacional, no se llegó a concretar nada", expresó Urioste.//MAM//.
12 de Mayo, 2006
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ANF a0066 12/05/2006 15:18:56ECO TIERRAS-PRINCIPIO-INRA.Ley INRA debe hacer cumplir principio: "la tierra es de quien la trabaja".La Paz, 12, MAYO, (ANF).- El Gobierno está empeñado en profundizar los alcances de la Ley del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), para hacer cumplir el principio básico de a Constitución y de la Ley de Reforma Agraria de hace 50 años, que establece que "la tierra es de quien la trabaja".Pero, a decir del director de la Fundación Tierra, Miguel Urioste, al Gobierno le costará encontrar soluciones fáciles que la "desentrampen" de la maraña jurídica a la que ha sido sometida durante los 10 años de su existencia.El objetivo principal de las modificaciones en la Ley y de la promulgación de ocho decretos referidos al tema tierra, es tener un control de las tierras del país, revertir y expropiar las grandes extensiones ociosas de manos de terratenientes y poder repartirlas a la gente que lo necesita para hacerla producir.Pero a lo largo de los últimos 10 años, la Ley INRA ha sufrido golpes de timón que la han hecho apartarse del principio básico que tenía, de que la tierra es para producirla, consignados originalmente en la Constitución Política del Estado (CPE) y la Ley de Reforma Agraria de 1953.Según Miguel Urioste, se ha creado una total inseguridad jurídica que ahora es difícil demostrar el cumplimiento de la Función Económica y Social (FES) de la tierra; se ha dado un origen turbio del derecho-propietario; se han normado tributos irrisorios de las propiedades dentro de la Ley 843; los organismos empresariales son quienes cobran por estos tributos; no se ha concluido el proceso de saneamiento, entre otros problemas."En las dictaduras se otorgaron tierras de manera ilegal, por favores políticos. De la misma manera actuó el MNR cuando estaba en el gobierno. Sobre todo estas concesiones se hicieron en el oriente porque eran territorios fiscales. Collas, cambas y chapacos recibieron tierra y se comprometían a hacer inversiones y trabajar la tierra en plazo de mínimo de dos años", recordó Urioste, quien participó de la redacción de la Ley INRA de 1996.Pero han pasado décadas y se puede verificar que en el oriente hay enormes superficies que no estaban trabajadas y todas las tierras tienen dueño. Para Miguel Urioste, de aquí el Estado empieza a tener una enorme dificultad para recuperar esas tierras.Cuando estos dueños quieren hacer ver que están cumpliendo la ley, demuestran que ha hecho algunas obras, han deforestado, o han alambrado sus terrenos. Pero la verdad es que han trabajado un pequeño espacio pero la mayoría está sin trabajar", reconoció el director de Tierra.Por otro lado, la gente que recibió tierras gratuitas, se las ha ingeniado para hacer escritos, actas notariadas, además de corromper a los jueces o coimear a los miembros del Consejo Agrario.Miguel Urioste manifestó que el objetivo de la Ley INRA es modernizar la Reforma del 53, acelerar la reforma agraria, eliminar el latifundio y sanear las tierras.Para este fin, se creo un proceso para legitimar el derecho propietario, llamado "saneamiento" que es técnico (revisión de las coordenadas que están inscritas en titulo de propiedad) y jurídico (verificación de la legitimidad del título). Al respecto, se han encontrado miles de títulos con firmas falsas hasta de los presidentes del país."Esta es la maraña que se ha legitimado. La Ley INRA de 1996 nació para poner orden; pretendía impulsar el saneamiento para corregir este drama. Pero en 10 años, con una inversión de 80 millones de dólares de la comunidad internacional, no se llegó a concretar nada", expresó Urioste.//MAM//.
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