La Paz, 12 de julio (ANF).- La Coordinadora de la Mujer ha pedido al MAS que se respete el derecho de las autoridades a cumplir su mandato, al rechazar la mala interpretación de la “alternancia” en los cargos electivos, que ha causado violencia y acoso en particular hacia las mujeres,
“Vemos con preocupación en varios sentidos, vemos una violación en la exigencia del suplente a que se cumpla algún acuerdo escrito, es una violación al derecho de las personas que han participado en la elección”, sostuvo la directora ejecutiva de la Coordinadora, Mónica Novillo.
El MAS resolvió este pasado fin de semana que se cumpla la rotación entre concejales titulares y suplentes. “Respetar y cumplir la alternancia entre concejales titulares y suplentes en los municipios donde se realizó un acuerdo escrito de manera coordinada y respetuosa con la estructura orgánica del instrumento político y las organizaciones sociales", dice su resolución.
Sin embargo, la presidenta del TSE expresó su preocupación por los niveles de presión y violencia que se han generado hacia las mujeres, al amparo -precisamente- de estos acuerdos entre partes para la rotación o alternancia de cargos.
“Preocupa más en este momento y lo digo en términos de lo que es esta situación de presión para las renuncias de las mujeres, en este procedimiento que se manifiesta como rotación o como alternancia de cargos. Lo planteaba en sentido estricto que esto vulnera la ley y vulnera la Constitución”, sostuvo Uriona la pasada semana.
Acuerdos que no son legales advierte -también- Novillo. “Si bien es un acuerdo o resolución de un ampliado del MAS, vemos con preocupación porque estos acuerdos han sido utilizados para presionar a las concejalas en particular”, sostiene.
Hizo un llamado a los partidos políticos a respetar los periodos de mandato de las autoridades electas, principalmente de las mujeres, porque han sido las más hostigadas o acosadas para que renuncien a sus cargos.
“Básicamente tiene que hacerse esa lucha al interior de los partidos o denunciar que están siendo presionadas”, sostiene Novillo, aunque reconoce que esa lucha interna que deben encarar las mujeres tiene muchos problemas, más si las autoridades observadas tienen protección de altos jefes del partido político, acotó.
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