
La Paz, 10 de abril de 2022 (ANF).- Sergio Guarberti, arzobispo de Santa Cruz de la Sierra, dedicó la homilía de hoy para recordar la celebración de la festividad de Ramos, cuando Jesús ingresó a Jerusalén, junto a sus seguidores y discípulos, en medio de una fiesta y alabanza que lo proclamaba como el rey justo, humilde y pacífico de los pobres.
“A pesar del aparente contrasto, hay una estrecha relación entre los dos eventos: Jesús es proclamado rey, y lo es, pero no con el poder y riquezas de los grandes, sino con el poder salvador del amor que vence al mal. Él entra en Jerusalén como rey justo humilde y pacífico que no opone resistencia a los que lo ultrajan”, dijo Guarberti en la celebración de hoy desde las afueras de la Catedral Metropolitana Basílica Menor de San Lorenzo de Santa Cruz.
En una masiva celebración de la misa, el arzobispo recordó que las autoridades religiosas y políticos de ese entonces no reconocían a Jesús como el Mesías enviado de Dios.
“Pero, sobre todo, ellos están enfurecidos porque Jesús es un peligro para ellos, Él ha denunciado en público sus abusos y atropellos en contra de los pobres y su instrumentalización de la religión y del culto del Templo para enriquecerse y mantenerse en el poder”, recordó.
El rechazo a Jesús, de parte de las autoridades judías, provocó una persecución a sus seguidores y una posterior condena de muerte en la cruz.
“Jesús se conmueve y llora no por la muerte que le espera, sino por la ciudad que no lo ha reconocido como el enviado de Dios”, enfatizó Guarberti.
Las festividades por Semana Santa se prolongarán hasta el siguiente domingo, cuando se celebre la resurrección de Jesús y la permanencia de su espíritu en cada uno de los creyentes.
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