La Paz, 18 de mayo de 2022 (ANF). - El Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) y la Cámara Agropecuaria de Pequeños Productores Agropecuarios del Oriente (CAPPO) sugieren al Gobierno nacional usar semillas transgénicas de maíz para abastecer del grano al mercado nacional y sostienen que los beneficios serán mayores en costos y producción.
“Podemos adoptar la biotecnología, implementar mayor cantidad de producción y, además, podemos tener las plantas más sanas y podemos producir en distintas áreas que se requiere y áreas cultivables. Para nosotros, una herramienta más es la biotecnología”, afirmó a la ANF el presidente de la CAPPO, Isidoro Barrientos.
La producción del maíz es el debate entre empresarios, productores y el Gobierno nacional, que asegura que hay la cantidad necesaria para el sector pecuario y consumo; en tanto, las empresas aseguran que no hay el grano y está en riesgo el costo de la producción de carne porcina y avícola.
Barrientos plantea los transgénicos como solución a mediano plazo y que debe haber una reunión de productores con autoridades nacionales para dar vía libre a una respuesta inmediata al desabastecimiento, que podría pasar por la importación de granos.
Dijo que la producción bajó en los pequeños y medianos productores, debido a que hubo mayor sembrado de soya que maíz; la sequía fue otro factor de pérdida y también la pandemia de la Covid-19.
Al respecto, el gerente del IBCE, Gary Rodríguez, afirmó que la solución para el riesgo de desabasteciendo de maíz es la ciencia, biotecnología. “No entendemos cómo autoridades de Estado tengan que hablar en contra de los transgénicos, en contra de la biotecnología, cuando ellos mismos cada día nos están diciendo que hay que vacunar a nuestros hijos contra el Covid, tenemos que vacunarnos; lo hacen obligatorio y esas vacunas contra el Covid las produjeron con biotecnología, son transgénicas”, sostuvo.
Rodríguez explicó que el uso del maíz modificado con biotecnología no es reciente y según datos de los pequeños productores, entre el 50 y 60% de la producción en Santa Cruz es transgénica.
Explicó que la modificación biotecnológica de las semillas ayuda a que sean tolerantes a la sequía, “con eso, disminuimos el costo de producción, nuestros agricultores tendrán mayores ingresos”, enfatizó.
El viceministro de Defensa al Consumidor, Jorge Silva, afirmó este miércoles que el Gobierno rechaza el uso de semillas transgénicas porque atentan contra la salud y el medioambiente. Aseguró que no hay escasez de maíz y detalló cuatro empresas que almacenan el grano y están bajo investigación para determinar si cometieron algún ilícito, como agio o especulación.
“Los alimentos transgénicos son tan saludables como los que se producen convencionalmente, porque se usa menos plaguicida, fungicidas, son más amigables con el medioambiente porque se quema menos diésel”, sostuvo Rodríguez.
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