
La Paz, 26 Mar. (ANF).- Los argentinos sienten verdadera paranoia cuando su seleccionado o clubes tienen que jugar en el estadio Hernando Siles, de La Paz, ubicado a 3.650 metros de altitud, y ese aspecto se constató este martes en la antesala del cotejo Bolivia-Argentina por la eliminatoria sudamericana del Mundial de 2014 en Brasil.
Paranoia, según la Real Academia Española (RAE), significa perturbación mental fijada en una idea o en un orden de ideas. Por lo tanto la altura es una paronoia para los argentinos.
“En Argentina no hay ciudades a más de 600 o 700 metros de altitud”, dijo el seleccionador argentino, Alejandro Sabella, a poco de llegar la noche del lunes a la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.
Pero Sabella olvida por ignorancia o escasa cultura que en el norte de Argentina hay asentamientos humanos que están a más de 1.000 metros de altitud, y es es el caso de San Salvador de Jujuy, situado a 1.250 metros sobre el nivel del mar.
Jujuy tuvo equipos jugando el torneo argentino donde también están clubes de Buenos Aires y otras ciudades argentinas.
Sabella fue colaborador de Daniel Alberto Passarella, quien en la eliminatoria de 1997 sentenció que “la pelota no dobla en la altura”.
El actual seleccionador argentino también fue miembro del cuerpo técnico de Uruguay que comandó Passarella, que como DT de River Plate obligó al desaparecido Ramiro “Chocolatín” Castillo a afirmar que “es inhumano jugar en la altura”, provocando sonrisas por la expresión del recordado coripateño.
Sabella, a su llegada a Bolivia, volvió a sorprender el lunes con su frase: “la pelota dobla más tarde”.
Pero los que sienten verdadera paranoia por la altura de La Paz son los comentaristas de la cadena Fox Sports, quienes no dejan de citar que “el verdadero adversario de Argentina será la altura, y no el seleccionado boliviano”.
Los comentaristas argentinos olvidan que el fútbol es un deporte universal, que se juega a nivel de mar y a 4.000 metros de altitud, en gélidas y altas temperaturas.
El nuevo choque Bolivia-Argentina permitió abrir la caja de voces de censura a la altura de La Paz, olvidando que ganar en el estadio Siles es más fácil que antes cuando se emplea un sistema de juego que sorprende al cuadro nacional.
//crm//