La Paz, 29 de abril de 2024 (AND).- Probar un rico k’arapecho es, sin duda, el “deber ser” gastronómico cuando llegas a Sucre. Es un plato tradicional de la capital que, si bien se elabora desde hace mucho tiempo, en la última década ha destacado entre los comensales por su sabor exquisito y su textura crocante y delicada a la vez. Estamos hablando de un plato preparado con charque de carne de vaca, deshidratado al sol y cocinado posteriormente con sal y limón. Es con este sabor que Alexis Sotomayor ha clasificado como una de las 15 finalistas del concurso Emprende Ideas en Gastronomía de la Fundación Samuel Doria Medina.
Alexis tiene un emprendimiento denominado K’arapanza, un restaurante donde puedes saborear k’arapecho y otros platillos elaborados con charque. Este negocio fue clasificado finalista del concurso entre más de 2.500 participantes de toda Bolivia.
K´arapanza es más que un restaurante; para Alexis es un sueño hecho realidad. Esta emprendedora joven no se cansa de imaginar los nuevos pasos que dará su negocio. En la actualidad, ya concretó el “k´arapecho al vacío”, que se vende a las personas interesadas en preparar el plato en casa.
Sotomayor estudió en la Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca. Después de comprobar que el campo laboral que proporcionan las empresas públicas es escaso, decidió crear su propia fuente de empleo.
Hoy K´arapanza atiende a sus comensales en un acogedor espacio de la ciudad de Sucre y también cuenta con un puesto en el Mercado Central. Allí se puede comprar al pasar un sándwich de charque acompañado con las diferentes salsas de la casa.
Los proyectos de Alexis no se detienen. Con una sonrisa en el rostro nos cuenta que quiere tener una fábrica de producción de charque de vaca y que un día espera que su producto sea comercializado en aeropuertos, mercados y supermercados de todo el país. Un nuevo ingrediente básico de la lista de compras de cada hogar boliviano.
Ella aspira ganar el premio del concurso Emprende Ideas en Gastronomía de la Fundación Doria Medina para avanzar en esa dirección, para lo que necesita comprar maquinarias que le ayuden a producir el charque.
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