
Admiro el optimismo del presidente Morales sobre la
despenalización del masticado de la hoja de coca. ANF trae la noticia de sus
declaraciones en Ivirgazama este 25 de diciembre en las que asegura que en
enero habrá “buenas novedades sobre el pijcheo de la coca”. La fecha anunciada
es el 8 de enero para conocer la decisión de los firmantes de esa convención es
exactamente en dos semanas.
Bolivia se retiró de la Convención de las Naciones Unidas sobre Estupefacientes
y anunció que se reincorporaría a ese acuerdo para volver a suscribirlo siempre
que se le incorpore una enmienda que retire la interdicción al masticado en los
países donde la hoja tiene un uso tradicional. Es el caso de Bolivia. A esa
enmienda están opuestos los Estados Unidos, Canadá y algunos países europeos
que creen que gran parte de a coca producida en el trópico cochabambino, donde
el presidente Morales habló, acaba en la producción de cocaína.
Desde hace dos años se aguarda la divulgación de los resultados de un estudio
sobre el consumo doméstico de coca. La entrega de esos resultados ha sido
aplazada nuevamente, hasta mayo.
Bolivia necesita 122 votos del total de 183 firmantes. Los oponentes requieren
de 61 (un tercio) para mantener la interdicción. Es una pulseta de Bolivia
contra algunas de las principales potencias económicas y políticas del mundo.
Si Bolivia obtuviera el apoyo que el presidente dice tener, será un triunfo de
la diplomacia plurinacional. Lo contrario…bueno, mejor mantener la lengua
detrás de los dientes.
“En enero tendremos buenas novedades sobre le pijcheo de la coca. Si logramos
eso, esperamos tener un buen resultado en esta campaña por la despenalización
del pijcheo y si hay una convocatoria va hacer para festejar esta situación,
soy optimista somos optimistas en esa batalla”, dijo el mandatario.
(*) El autor es Premio Nacional de Periodismo