La Paz, 24 de julio (ANF).- El presidente del Senado, José Alberto Gonzales, al señalar que están a la espera que el Tribunal Supremo de Justicia remita los antecedentes del caso Quiborax, afirmó que el expresidente Carlos Mesa y quienes lo apoyan deben estar tranquilos porque el tiempo no alcanzará para “meterlo preso o hacer una sentencia ejecutoriada”.
“Quienes apoyan a Mesa (que) se queden tranquilos porque no vamos a alcanzar con nuestros plazos a meterlo preso o a hacer una sentencia ejecutoriada. Tranquilos los que están nerviosos con ese tema, el propio señor Mesa si está nervioso con el tema, que se quede tranquilo”, afirmó Gonzales en declaraciones a la prensa.
La autoridad se refirió al tema luego que la Sala Penal del Tribunal Supremo de Justicia habría resuelto recomendar el enjuiciamiento del expresidente Mesa por el caso Quiborax, su informe será analizado este miércoles en la Sala Plena del máximo tribunal de justicia.
Si el TSJ resuelve remitir los antecedentes a la Asamblea Legislativa Plurinacional esta instancia deberá determinar si autoriza o no el juicio de responsabilidades, si da su visto bueno se abrirá el juicio mismo, si no autoriza, el caso se archivará, aunque el MAS tiene dos tercios.
Gonzales incluso dijo que de acuerdo a la experiencia institucional un juicio de esta naturaleza no dura menos de dos años. “Los procedimientos nos aconsejan que un juicio de estas característica no demora menos de dos años, esa es la experiencia institucional”, detalló.
Por lo que considera que el argumento de Mesa sobre que es un juicio político no es aceptable, el presidente del Senado manifestó que se trata es develar las responsabilidades respecto los recursos públicos comprometidos a raíz de una demanda internacional que el Estado perdió en un tribunal internacional.
“Entonces, que descarte dentro de su argumentación el señor Mesa que se trata de un juicio político para inhabilitarlo. No, no es esa la intención, la intención básicamente es que quien podría tener una cuenta pendiente con el Estado que son los recursos del pueblo rinda cuentas ante la justicia, punto”, sostuvo.
El Gobierno acusa al expresidente y vocero de la causa marítima del juicio internacional que la empresa Quiborax le inició ante el CIADI, demanda que el Estado perdió y terminó pagando 42,6 millones de dólares.
Mesa responsabiliza a las autoridades gubernamentales, sobre quienes estuvo a cargo la defensa de los intereses del Estado, por más de una década. Argumenta que la defensa fue “pésima” a pesar de las condiciones favorables para enfrentar el proceso.
Gonzales acotó que el resto de argumentos “es novela, es especulación, es politiquería barata”; por lo tanto la Asamblea aguardará que el TSJ remita los antecedentes para, en el marco del procedimiento, analizar el caso.
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