Medidas gubernamentales afectan al turismo en Rurrenabaque, pero su gente no se deja vencer
La imposición de visas a los israelíes, el nuevo impuesto de hasta Bs 100 que se cobrará a los turistas, el anuncio de la construcción de dos represas para un proyecto hidroeléctrico y la pésima pista de aterrizaje son algunos de los problemas que enfrenta la zona, pero el pueblo sigue teniendo vida y los extranjeros disfrutan de la naturaleza en ese destino. ANF estuvo en el lugar y entrega este reportaje.
24 de Octubre, 2016
Compartir en:
Nancy Vacaflor G.
Rurrenabaque, 24 de octubre (ANF).- Rurrenabaque,
también conocida como la “Perla de la Amazonía”, es uno de los
atractivos naturales más importantes de Bolivia. Sus habitantes y las
comunidades indígenas del Parque Nacional Madidi trabajan con tesón para mantener la vocación turística de la zona a
pesar de las políticas gubernamentales y problemas que han afectado esta actividad por la imposición de visas a los israelíes, la aprobación de un nuevo impuesto de hasta Bs 100 a los turistas que ingresan al país, el anunciado proyecto hidroeléctrico de El Bala y hasta las pésimas condiciones de su pista de aterrizaje.
No se ha convertido en un “fantasma”
como muchos creen, pero, sin duda, hoteleros y operadores de turismo
coinciden en que existen amenazas externas que tienen un impacto “negativo”
en la visión de Rurrenabaque como “destino turístico”, uno de los
principales del país.
De hecho la tensa relación del
Gobierno con la administración de Estados Unidos, la decisión de imponer
visas a los ciudadanos israelíes y ahora el cobro de un impuesto a
los turistas ha puesto en una difícil situación a toda la cadena
productiva de esa región.
A estos problemas se suma la intención
de construir dos represas en medio de los parques nacionales Madidi y
Pilón Lajas, lo que verdaderamente significaría “la muerte” y “la
desaparición” de los albergues, comentan los indígenas que tienen
emprendimientos turísticos basados en el ecoturismo.
Las noches en Rurrenabaque siguen
siendo muy activas, los pubs, cafecitos y restaurantes están llenos, en
las calles se ve a extranjeros de diversos países, las agitadas noches
no son impedimento para partir en las madrugadas en sus recorridos en
bote desde el poblado hasta adentrarse a la selva y las pampas
Al año Rurrenabaque recibía 20.000
turistas, el 20% más o menos eran de origen israelí, actualmente ese
número se ha reducido significativamente por las medidas de Gobierno.
Intentamos recuperarnos con el esfuerzo de los operadores de turismo,
dice Rodrigo Mariaca, gerente del albergue Chalalán y representante de
la Cámara de Turismo.
“Los emprendedores siempre han estado
empujando y buscando alternativas, es cierto que ha habido un apoyo
importante del Ministerio de Turismo, pero sentimos que hay mensajes
contradictorios, por ejemplo, la decisión de un impuesto a los turistas
creemos que va a desalentar el flujo ya golpeado para el turismo
internacional”.
A Rurrenabaque le costó poco más de
dos décadas trabajar en la consolidación como destino turístico, los
operadores, la hotelería y sus habitantes saben que esa es su fortaleza
y a pesar de las señales en contra del turismo los esfuerzos continúan.
“Como operadores estamos tratando de
mejorar los servicios nacionales e internacionales”, dice Silverio Bozo,
que también es operador de turismo y protesta por las medidas del
Gobierno.
“Los prestadores de servicio no hemos
desmayado no nos dejamos vencer, seguimos mejorando la calidad de
servicios, es a pulmón de todos los inversores pequeños o medianos”,
añade la presidenta de la Cámara Hotelera, Maritza La Torre.
La Cámara Hotelera tiene 26 hoteles
registrados, quizá 30 contando a los que no se inscriben, de los cuales,
no ha cerrado ninguno, pero sí tienen dificultades para mejorar sus
infraestructuras de acuerdo a los segmentos de turistas que llegan.
Precisamente, una de las demandas de
este sector es el apoyo en créditos para mejorar la infraestructura
hotelera en función de los segmentos turísticos.
La deteriorada pista de aterrizaje
Para ser uno de los destinos
turísticos más importantes del país por ser una de las regiones quizás
con la mayor biodiversidad del mundo, parece increíble que no tenga una
pista de aterrizaje en buenas condiciones. Rurrenabaque sigue recibiendo
a los turistas en una pista de aterrizaje auxiliar.
La pista que debía ser provisional
para 90 días, está totalmente deteriorada y llena de baches, no parece
una pista de aterrizaje sino una calamina ondulada. A esta pista solo
pueden llegar pequeños aviones con capacidad para 19 personas, por eso
Amaszonas tiene el monopolio.
“Somos un destino turístico catalogado
entre los cuatro más importantes del país, pero tenemos todas estas
deficiencias. Ya deberíamos estar con una buena terminal aérea y otras
condiciones” para los turistas, dice La Torre.
Pero no solo es la inseguridad, como
no tiene condiciones internacionales, cuando hay mal tiempo o la empresa
tiene problemas con sus aviones, los turistas o no pueden llegar o no
pueden salir, lo que genera una mala imagen para Bolivia.
La inevitable preocupación de El Bala
Leoncio Janco es uno de esos
emprendedores que a mucho esfuerzo logró montar una empresa y junto a
otras 10 familias impulsaron una sociedad de la que hoy viven. No puede
imaginar un bloque de cemento en pleno estrecho de El Bala, precisamente
por donde recorren los botes para que los turistas aprecien la
naturaleza viva.
La Torre solo se anima a decir que
“provocará un impacto negativo”. “Nadie va a querer venir a ver una
laguna artificial, Rurrenabaque ofrece naturaleza la biodiversidad del
parque Madidi y la Pampas de Yacuma”, comenta.
Mientras que Mariaca cree que con ese
proyecto el turismo no podría “sobrevivir”. La construcción de las
represas sería un desastre para nuestro sector, no creemos que podemos
sobrevivir a eso”, porque rompería toda la imagen natural que existe.
En el pasado las agencias ofrecían
"safari-tours", que estaban orientados a la cacería, con el tiempo
entendieron que esto no era sostenible y que había que preservar a los
animales y la naturaleza como la principal fuente del negocio del
turismo. De esa manera ahora todas las empresa hacen "ecotours". En el
Tuichi hay 22 albergues, algunos podrían quedar inundados por los
embalses de las represas.