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Nacional Sociedad

Pacientes con cáncer se refugian en la religión y emigran a Argentina en busca de curación

Hay tres pacientes que no reciben braquiterapia porque el Ministerio de Salud aún no las convoca para que accedan al tratamiento.
22 de Noviembre, 2018
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Una pacientes con cáncer del Hospital de Clínicas. Foto: ANF
Una pacientes con cáncer del Hospital de Clínicas. Foto: ANF
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La Paz, 22 de noviembre (ANF).- El drama de los enfermos con cáncer en el país continúa pese a que las sesiones de radioterapia son gratuitas por un año. Hay pacientes que desisten de hacer el tratamiento y se refugian en la religión o emigran a países como Argentina en busca de cura para su enfermedad.

Según datos oficiales de la Asociación de Personas con Cáncer, desde que el Gobierno anunció la gratuidad de los tratamientos, el pasado 17 de octubre, 14 pacientes ya se beneficiaron de las radioterapias y hay una lista de 47 enfermos que requieren de manera urgente las sesiones.

Sin embargo, dos personas desistieron de las radioterapias por diferentes motivos, principalmente económico, y la burocracia en los trámites: “una decidió irse a Argentina para probar suerte y la otra se refugió en la religión”, señala la organización.

Otros dos fallecieron al iniciar el tratamiento. A la fecha suman 25 las víctimas fatales del cáncer de esta gestión, la última persona murió ayer, una mujer que tenía cáncer muy avanzado y requería cuidados paliativos.

“Lo más triste es que de manera continua tenemos que perder a un hermano o hermana”, detalla Susana Zuazo de la Asociación de Pacientes con Cáncer, que resalta la importancia de que los enfermos sean atendidos con inmediatez para que reciban de manera oportuna los tratamientos.

La mayoría de los casos de cáncer son detectados en etapa avanzada y “muy avanzada”. Hay otros que al conocer su diagnóstico, por falta de dinero, no realizan el tratamiento de forma inmediata. Otros se resignan y deciden refugiarse en la religión.

Como el caso de Inés (nombre referencial), una paciente con cáncer de mama, que luego de luchar cerca de dos años con la enfermedad decidió “entregarse a Dios”. Dice que se siente cansada y debilitada por los tratamientos.

“He dejado mi vida en sus manos, solo Dios me va ayudar a salir del cáncer”, dice.

Otra paciente es Juana, de 52 años, que hace dos semanas llegó de Potosí en busca de cura para su cáncer cervicouterino. La enfermedad le detectaron hace más de un año, pero por falta de recursos no pudo tratarse. Cuando se enteró de la gratuidad de las radioterapias que anunció del Gobierno, no lo pensó dos veces y emprendió viaje desde su natal San Roque.

No tiene familia en La Paz y en su comunidad dejó a sus seis hijos, el más pequeño de seis. “Los extraño”, dice la mujer mientras revela que es la primera vez que se separa de sus seres queridos. Tampoco tiene dinero, pero sobrevive, ahora, de la caridad de las personas que conoció en el Hospital de Clínicas.

“He llegado sin conocer la ciudad (de La Paz), tenía harto miedo, apenas he llegado con 500 bolivianos y no me ha alcanzado, pero quiero curarme.”, dice, mientras relata que hace un poco más de un año le detectaron cáncer. Al principio no le dio importancia porque desconocía la gravedad de ese padecimiento.

Para confirmar la enfermedad tuvo que viajar hasta Sucre, su pasaje fue costeado por amigos y familiares. Los estudios revelaron que la enfermedad había avanzado y que debía someterse a sesiones de radioterapia para luchar contra el cáncer, pero por falta de recursos no pudo iniciar el tratamiento a tiempo.

“No tenemos plata, ni casa tengo, donde vivo es prestado. De dónde voy a sacar plata. Me ha dicho que necesitaba más de 3.000 bolivianos, nunca he visto tanta plata, me he aguantado los dolores y parecía que ya no me dolía, por eso no he regresado al doctor”, indica.

Sin embargo, en agosto pasado, las molestias fueron intensas y más dolorosas. Decidió buscar ayuda médica, pero por la falta de un área de Oncología en Potosí y profesionales, además de dinero, decidió nuevamente postergar su tratamiento.

Hasta que se enteró sobre la gratuidad que anunció el presidente Evo Morales, el pasado 17 de octubre, para los enfermos con cáncer, y decidió migrar para buscar una cura a su enfermedad, sobre todo por sus hijos que la tienen solo a ella.

“Una señora en el mercado me ha dicho, ‘anda a La Paz, están atendiendo gratis a los enfermos con cáncer. Seguro te van atender y te vas a curar. Tienes que pensar en tus wawas’, por eso he venido”, dice.

Juana confía que las radioterapias la ayudarán a sobrevivir para acompañar a sus hijos por muchos años más.
Braquiterapia

Según la Asociación de Pacientes con Cáncer, hay tres pacientes que aún no reciben el tratamiento de braquiterapia en la Caja Petrolera de Cochabamba porque no fueron convocadas por el Ministerio de Salud, que es la instancia que se comprometió a mediar las sesiones.

De las tres personas, una tiene 41 años y terminó su radioterapia, tratamiento que antecede a la braquiterapia, el pasado 20 de octubre; la segunda tiene 55 y finalizó sus sesiones de radioterapia el 21 de octubre; y, la última de 65 años espera desde el 28 de octubre.

La recomendación médica es que la braquiterapia inicie ni bien se termine las sesiones de quimioterapia y radioterapia, a las que se someten las mujeres con cáncer cervicouterino.

En esa línea, la  Asociación de Pacientes con Cáncer lamenta la demora en los tratamientos de las pacientes que presentaron complicaciones en salud como infecciones urinarias y defensas bajas.

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    pacientes con cáncer,Radioterapias,Hospital de Clínicas