La Paz, 20 de abril (ANF).- Poco a poco van llegando vacunas contra el Covid-19 a Bolivia, y al igual que ocurre en regiones de América del Sur y que conforman la Amazonía, los pueblos indígenas demandan un igual acceso a dichas vacunas y atención urgente dada su vulnerabilidad. Piden además priorizar a los ancianos y ancianas de estos territorios.
“Los Sedes a nivel departamental y el ministerio de Salud no están incluyendo a los pueblos indígenas en todo este escenario de pandemia. Si bien han llegado las vacunas para las personas de la tercera edad, es claro que solo es para adultos mayores de ciudades capitales y no así para los pueblos indígenas donde están nuestras abuelas y abuelos que también merecen las vacunas y ser tomados en cuenta”, dijo a ANF Adolfo Chávez, Coordinador de Relaciones Internacionales de la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA).
Hoy llegaron otras 200 mil vacunas Sputnik V al país, y serán distribuidas a las diferentes regiones para ser administradas de acuerdo a los cronogramas y edades que corresponden en los centros de salud. Sin embargo, Chávez asegura que estas vacunas son de difícil acceso para los pueblos indígenas, ya que muchos se encuentran en zonas alejadas de las urbes donde funcionan estos centros de vacunación y además muchos ancianos tienen problemas de salud que les impiden sus traslados y viajes tan largos.
“Hay una demanda regional y una gran preocupación por los indígenas de la cuenca amazónica y justamente los Estados no están tomando en cuenta a estos pueblos y en el caso de Bolivia, no hay vacunas ni gestión para ellos. Por eso es que hay una discriminación al interior y se ignora a los pueblos, porque hasta hoy no tenemos un instructivo para saber cómo llegaran hasta las comunidades y vacunar a nuestros abuelitos”, agregó Chávez.
Hoy el ministro de Salud, Jeyson Auza, aseguró que el plan de vacunación de Bolivia busca inmunizar a la población en todas las regiones. “Seguramente vamos a tener dificultades, se nos ha acusado de que no existían las vacunas suficientes. (…) pero vamos a incrementar las cantidad de vacunas”.
Hace unos días, frente a la amenaza de la variante brasileña pueblos indígenas de tierras bajas del país se declararon en emergencia por su cercanía al gigante de Sud América y el riesgo que corren dada su vulnerabilidad.
“La Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente, Chaco y Amazonía de Bolivia (CIDOB – Orgánica) y sus 34 naciones y pueblos indígenas nos declararnos en estado de emergencia sanitaria por la nueva ola del rebrote del Covid-19 en toda la frontera que compartimos con el hermano país de Brasil”, detalla el pronunciamiento que hoy se publicó.
Ya desde hace unas semanas, dirigentes indígenas de pueblos de Pando y Beni alertaron de la gravedad de que la nueva variante del Covid-19 ingrese a sus territorios desde Brasil.
Entre los pueblos indígenas que se consideran están en grave riesgo por el ingreso de esta variante desde Brasil están el Machineri, Yaminahua, Multiétnico I y II, Tacana Cabineño, Cabineño, Esse Ejja, Chacobo – Pakahuara, Araonas, Joaquiniano, More, Itonama, Baures, Canichana, Guarasugwes y Chiquitano.
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