La Paz, 10 de abril (ANF).- El viceministro de Seguridad Ciudadana, Carlos Aparicio, informó este lunes que el supuesto cabecilla del asalto a Brinks, Mariano Tardelli, está vinculado a otros delitos como tráfico de drogas, de tierras e incluso de piedras preciosas.
Por eso en las investigaciones también se “tiene que profundizar en el tema del tráfico de tierras (que eran) utilizadas con el fin ilícito del narcotráfico a través de ‘palos blancos’, (asimismo) en el tema de que Tardelli compraría piedras preciosas para poder sacarlos del país de manera ilegal”, dijo.
Explicó que Tardelli tiene el control de varias haciendas en el departamento de Santa Cruz y entre ellas destacan las propiedades denominadas “Laura”, “Arco Iris” y “Alborada”.
En dichos predios, según información del Gobierno, el presunto líder de la organización criminal elaboraba y acopiaba droga, para luego hacer negocios con el Primer Comando Capital (PCC) de Brasil.
Además la autoridad afirmó en una entrevista televisiva que Tardelli mantenía relación con dos dirigentes, un alcalde y dos concejales para concretar sus intereses de tráfico de tierras.
En ese marco, el Viceministro afirmó que algunos dirigentes, como Romer Méndez y su hijo, ahora son acusados de provisionar medicamentos y alimentos a los delincuentes que durante varios días se encontraban en el monte sin ser capturados por la Policía.
Detalló que Tardelli se ganó la confianza de algunos pobladores y autoridades del sector de Santa Ana y comunidades aledañas porque supuestamente les daba motores, vaquillas y les pagaba conjuntos musicales para sus fiestas.
Por eso, el Gobierno cree que algunos comunarios ocultaron en su momento al ahora detenido entorpeciendo la labor de la Policía.
Entre tanto, los encarcelados por el caso Brinks suman ocho, después de que –según el fiscal departamental de Santa Cruz Freddy Larrea– fueron imputados por los delitos de robo agravado, organización criminal, tenencia y portación de armas, y asociación delictuosa.
Sin embargo, según Aparicio, aún hay diez personas prófugas y la Policía continúa con el operativo de captura de los mismos.
La organización criminal, que atracó el pasado 30 de marzo un vehículo de la empresa Brinks en la carretera Santa Cruz-Roboré, se llevó más de un millón de dólares y aunque se registran los primeros detenidos, el dinero sigue sin aparecer.