Advierten la consolidación de una "policía gubernamental" y piden reformas para la institución

Esta situación viene reforzada con la promulgación de la Ley 1387 de Carrera de Generales y de Ascensos de la Policía Boliviana que en su Artículo 251 inciso II pone al ministro o ministra de Gobierno en el mando policial.

“Resulta que al ingresar a la estructura de mando (de la Policía) al Ministro de Gobierno, que es parte del Órgano Ejecutivo, significa que la policía está perdiendo su independencia funcional y operativa”, dijo a ANF el coronel Juan Manuel Quinteros, abogado y docente universitario de posgrado, especialista en investigación criminal y ciencias forenses.

Quinteros indicó que el modelo de policía gubernamental no es reciente y que se ha incorporado en varias constituciones de países de Latinoamérica, pero a medida que las sociedades han ido cambiando, las fuerzas policiales se fueron adecuando y profesionalizando su accionar.

Sin embargo, agregó, “en Bolivia hemos quedado un poco estancados desde hace ya varios años, más de una década, las sociedades han avanzado, pero el modelo de policía se ha estancado y es más, se ha consolidado este modelo de policía gubernamental que ya estaba caduco en América Latina”.

Dijo que algunos gobiernos considerados progresistas han retomado el modelo que apunta a tener una policía que solamente obedezca órdenes del gobierno de turno.

“Preocupa muchísimo porque la policía boliviana poco a poco debería apuntar su accionar y su profesionalidad a atender las necesidades que tiene la población en cuanto a seguridad, pero se ha profundizado el modelo de policía gubernamental con la aprobación de la Ley 1387 de carrera de generales y ascenso de la policía”, apuntó.

Aseveró que la Ley 1387 va en contra de la Constitución Política del Estado y en contra de la Ley Orgánica de la Policía que actualmente sigue vigente.

Refirió que los últimos acontecimientos en La Paz y Santa Cruz dan cuenta de que la policía está actuando de manera “muy peligrosa” en cuanto al uso de la fuerza, además, “los medios de comunicación han reflejado que en algunos momentos la policía da la impresión de que estaría apoyando a grupos que son partidarios del gobierno actual”.

Explicó que la policía para hacer uso de la fuerza tiene que basarse en estándares internacionales, además que tiene un manual de operaciones para el mantenimiento y la preservación del orden público, donde “una de las principales normas es que debe hacer el uso de la fuerza cuando sea estrictamente necesario”.

“Hemos visto el uso de la fuerza en personas indefensas, entonces todas estas cosas nos hacen pensar que la seguridad interna del país está en serio riesgo, porque prácticamente daría la impresión de que la policía ha perdido en algún momento su independencia funcional y operativa”, apuntó.

Quinteros indicó que varios gobiernos han intentado modernizar la policía, pero no lo han conseguido por dos aspectos fundamentales: falta de voluntad política y factor económico.

“Yo soy testigo de que el gobierno no abre los canales necesarios como para que la policía se modernice”, dijo.

Citó que hace más de dos años presentaron un proyecto para el fortalecimiento y modernización de la policía, especialmente en el campo técnico-científico, “y hasta hoy no hemos recibido respuesta, ni del Ministerio de Gobierno ni del mando policial, y eso muestra de que no hay una voluntad política ni económica para poder llevar adelante este proyecto”.

Para el abogado Germán Gutiérrez, lo que señala la Constitución de que la Policía está destinada a la defensa de la sociedad no es tal por la vinculación política que tiene, y esa vinculación “lo que hace es defender al poder político de turno que es lo que hemos visto en el último tiempo de manera muy clara y contundente”.

Dijo que de ahí viene la discusión que se planteó en Santa Cruz de revisar la relación de las regiones con el Estado, y uno de los elementos que hay que revisar es forma de relación que tiene el Estado con una entidad como la Policía, que tiene el monopolio del uso de la fuerza y de la violencia.

Refirió que en otros países la policía está dirigida por el alcalde, donde hay una referencia muy directa con la región, con el establecimiento de espacios muy puntuales y que podría ser altamente beneficioso a esta relación, porque “así la policía corresponde al mando de la región, corresponde al mando del alcalde y no de la ciudad de La Paz, que es lo que ha sucedido con el Ministro de Gobierno que ordena a la policía y lleva grandes contingentes a Santa Cruz para reprimir”.

Gutiérrez destacó que la policía de hoy “ya no da para más, ha entrado en una profunda crisis que además es una crisis no solamente de una falta de vinculación para servir a la sociedad, sino con bolsones terribles de corrupción con el narcotráfico, con la extorsión, con la represión, pero además con el servicio al poder político de nivel nacional en La Paz, de donde se dan las instrucciones no solo para combatir al delito, sino para combatir al contendiente político del gobierno”.

Reiteró que como está la Policía hoy, ya no puede seguir en esas condiciones, por lo que se deben realizar cambios de fondo “porque su crisis es también de fondo”.

“Lo que ha sucedido en Santa Cruz es evidente, se ordena a un policía plantar pruebas para acusar a una determinada persona, ese policía podía haber efectuado la representación que correspondía para decir: ‘no puedo cumplir esto, porque va contra la ley’”, agregó.

En ese sentido dijo que lo primero que tiene que hacer la Policía, el Ministerio Público, las Fuerzas Armadas es el cumplimiento de la Constitución y la ley, “pero el día de hoy eso no existe, nadie cumple con la ley, todos vulneran empezando por la policía, empezando por el gobierno”.