La Paz, 1 de diciembre de 2022 (ANF). – Los gobernadores de Santa Cruz y La Paz, Luis Fernando Camacho y Santos Quispe, respectivamente, coincidieron en que el fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre el caso Silala es una segunda “derrota” de Bolivia frente a Chile ante instancias internacionales; para el expresidente Carlos Mesa se trata del resultado de la improvisación; entretanto, el Gobierno se mostró “complacido” con el resultado.
El jefe de Estado, Luis Arce Catacora, sostuvo en sus redes sociales que la CIJ ratificó los derechos que tiene Bolivia sobre las aguas del Silala y la soberanía sobre el desmantelamiento de los canales artificiales.
“Bolivia resolvió la controversia con un pueblo hermano gracias al trabajo basado en estudios científicos y a nuestra estrategia de relaciones internacionales. Continuaremos esta labor en beneficio de los pueblos”, escribió Arce en su cuenta de Facebook.
El gobernador de Santa Cruz calificó el fallo como un “rotundo fracaso” de la política internacional de los gobiernos del Movimiento al Socialismo (MAS), Evo Morales y Luis Arce Catacora.
El también exlíder cívico recordó que en 2018 el país perdió absolutamente cualquier tipo de reclamo por una salida al mar después que la CIJ dijo que Chile no tiene ninguna obligación de negociar con Bolivia una salida hacia el pacífico. Subrayó que hoy nuevamente los bolivianos, sobre todo Potosí, no recibirá ni un centavo en retroactivo por el uso de las aguas del Silala.
“Estos litigios internacionales fueron el justificativo para gastar millones y millones de dólares en corrupción y nefasta propaganda política; estas dos derrotas en La Haya son el legado de la politiquería irresponsable y violenta que sembró Morales y que el pueblo no debe olvidar”, señaló el gobernador quien dijo que tendría que abrirse un juicio de responsabilidades “por semejante daño que le hizo al país y a nuestra historia”.
Casi en esa misma línea, el gobernador de La Paz, Santos Quispe, criticó al gobierno de Morales por gastar dinero en la contratación de una delegación internacional para la defensa de las aguas del Silala, cuyo resultado dejó entrever que se cometió traición a la patria porque anticipadamente el país reconoció que las aguas del Silala son internacionales.
“Uno, hemos perdido la salida al mar, ahora nos salen con esto del Silala, aquí directamente hay incumplimiento de deberes en el cual la justicia debe dar contra Evo Morales porque esas cosas no se toleran”, arremetió Quispe.
El líder de Comunidad Ciudadana (CC) y expresidente Carlos Mesa expresó que la decisión de la CIJ sobre el Silala mostró la debilidad de política exterior boliviana y develó la improvisación, irresponsabilidad y sobre todo opacidad por parte del Estado en un tema tan importante. “El gobierno del MAS debe una explicación clara y urgente al país”, exigió.
En tanto, para Eduardo Rodríguez Veltzé, expresidente de Bolivia, la solución fue salomónica. Opinó que la CIJ reconoce coincidencias en la aplicación del Derecho Internacional, estudios científicos y alienta acuerdos con el vecino país.
“Ni ganadores ni vencidos, a mejorar políticas sobre recursos hídricos transfronterizos”, escribió en su Twitter.
El canciller Rogelio Mayta calificó de positivo para los intereses de Bolivia el fallo de la CIJ y agregó que ahora queda analizar si se desmantelarán los canales artificiales que construyó Chile para incrementar el caudal hacia su territorio.
La CIJ emitió su fallo donde estableció que las demandas de Chile quedaron sin efecto porque Bolivia aceptó que las aguas del Silala tienen un cauce internacional y por ello ambos países tienen derecho a su uso de forma equitativa y razonable.
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