La Paz, 7 de enero (ANF).- El presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Salvador Romero, manifestó hoy durante el informe de gestión 2019, que fueron muchos los aprendizajes y retos que los pasados sucesos le dejaron al país y fundamentalmente a esta entidad, como el fortalecimiento del sistema técnico y la recuperación de la imparcialidad que quedó cuestionada por quienes fungían como vocales en el anterior tribunal electoral.
“Juntos, el trabajo técnico serio y la imparcialidad componen la única llave para recuperar la confianza ciudadana. Ambos representan la base de una elección íntegra, abierta a la supervisión. Bolivia ya tuvo la experiencia de un organismo electoral institucionalizado que le brindó resultados certeros, ese recuerdo perduró y hoy fija una vara alta que no intimida, más bien estimula”, expresó Romero.
Ya antes de los comicios del 20 de octubre, anulados tras la confirmación del fraude electoral en favor del MAS, los integrantes del anterior tribunal electoral que hoy están detenidos y son procesados, fueron cuestionados por su cercanía y “favorecimiento” al expresidente Evo Morales. Se conoció inclusive de reuniones entre María Eugenia Choque (expresidenta del TSE) y Morales, realizadas en el despacho presidencial.
Este y otros hechos fueron marcando la opinión pública de un TSE dependiente del poder de turno.
Por los indicios del delito de “fraude electoral”, fueron detenidos los vocales del pasado TSE. Choque, recluida en el penal de Obrajes en la urbe paceña, repetía en sus declaraciones que es inocente. “No hubo fraude, soy inocente, soy una presa política”.
Previamente a su detención y tras la difusión de los resultados de las elecciones del 20 de octubre que fueron cuestionados por diferentes sectores, Morales, aún presidente, daba a conocer públicamente su respaldo a Choque, con argumentos de que había racismo y discriminación hacia ella. “Para ellos, el delito del actual Tribunal Supremo Electoral es que una hermana aymara, de pollera, profesional, sea la presidenta, eso no perdonan, es una cuestión de clase que no perdonan”, afirmaba Morales.
Eventos posteriores, declaraciones y auditorias consolidaron la anulación de las elecciones del 20 de octubre, y la ley de convocatoria a nuevos comicios, ya en el gobienro de Jeanine Añez.
Fue Álvaro Andrade, gerente de la empresa auditora Ethical Hacking, contratada por el TSE para la auditoría del proceso electoral, quíen denunció que el mismo estuvo “viciado de nulidad”, porque se detectaron varias vulnerabilidades e irregularidades en la Transmisión de Resultados Electorales Preliminares Parciales (TREP). “Era posible interceptar y leer todas las comunicaciones del TREP. Eso significaba que se podían ver los votos y cambiarlos”.
“Una labor técnica e imparcial es imprescindible, pero el éxito de una elección como la del 2020 excede con creces esos factores. Se requieren acuerdos básicos y el consenso de todos los actores políticos e institucionales, el país ha dado pasos significativos y rápidos en esa dirección con la definición concertada de las reglas de juego para los comicios y con la selección de los árbitros para la competencia”, agregó el presidente del TSE, a tiempo de adelantar que en las siguientes horas se dará a conocer el presupuesto oficial para este proceso electoral, que será “más austero” que el ya anulado.
En las últimas horas, la entidad electoral presentó el calendario de más de 100 actividades en el marco de los comicios nacionales de este próximo 3 de mayo, tomando en cuenta también una posible segunda vuelta.
Del 18 al 26 de enero, los jóvenes que cumplen 18 años hasta el 3 de mayo y quienes cambiaron de domicilio deben inscribirse al padrón electoral; tal empadronamiento se realizará sólo en el país y no en el exterior, como en la anterior elección.
El 3 de febrero es la fecha tope para que los partidos políticos inscriban a sus correspondientes candidatos.
Este calendario tomó en cuenta que en caso de que ningún binomio obtenga la victoria en primera vuelta, la segunda se realizaría el 14 de junio.
De no haber segunda vuelta, la posesión de autoridades electas podría ser entre el 29 de mayo y 12 de junio. Y si hubiese segunda vuelta, entre el 8 y 22 de julio.
“Se aproxima una travesía riesgosa, porque las campañas agitan pasiones, avivan tensiones, tanto más porque todavía siguen latentes polarizaciones ondas, recelos, desconfianzas y tendencias excluyentes, atizarlas puede quebrar equilibrios todavía frágiles”, agregó Romero y ratificó la presencia de veedores internacionales en este proceso.
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