El presidente Alberto Fernández y la exministra Patricia Bullrich. Foto: ambito.com
La Paz, 12 de julio (ANF).- La exministra de seguridad del gobierno argentino, Patricia Bullrich, lamentó las disculpas “injustificadas” del presidente Alberto Fernández al gobierno de Bolivia, apenas conoció una carta que supuestamente revela el apoyo con munición militar de su similar, Mauricio Macri, al gobierno transitorio de Jeanine Áñez, tras la renuncia y salida de Bolivia de Evo Morales.
“La complejidad de la cuestión y el honor de la República (Argentina) exigían a usted (presidente Fernández) una mayor diligencia antes de comprometer el honor de la nación pidiendo disculpas injustificadamente (a Bolivia) apenas le llegó la copia de una carta cuyo supuesto autor ni siquiera reconoce”, es la respuesta de Bullrich a la carta de Fernández titulada “Dolor y vergüenza” que fue dirigida al gobierno boliviano.
Bullrich dijo que “dolor y vergüenza” causa la “imprudencia, la impudicia y la velocidad” con las que Fernández compromete al Estado Argentino al reconocer “semejante acusación sin la mínima indagación ni prueba”, por el solo hecho de que en ese momento gobernaba el país un presidente de un partido diferente al suyo.
El 8 de julio, el canciller boliviano Rogelio Mayta acusó al gobierno del expresidente de Argentina, Mauricio Macri, de aportar con “munición letal” para reprimir las protestas sociales y consolidar el gobierno de Jeanine Añez en 2019.
Como prueba, Mayta mostró una carta firmada supuestamente por el excomandante de la Fuerza Aérea Boliviana, Gonzalo Terceros -ahora procesado-, dirigida al exembajador de Argentina en La Paz, Normando Álvarez, para agradecerle por el envío de la “munición letal”. Tanto Terceros como Álvarez negaron la veracidad de esa misiva.
Bullrich indicó que el 15 de julio de 2020, en la rendición de cuentas de Servicio Administrativo Financiero de la Gendarmería Nacional de Argentina, se informó que la Agrupación Fuerzas Especiales de GNA, durante su permanencia en Bolivia, “ha brindado seguridad a la Embajada Argentina en el Estado Plurinacional de Bolivia durante los meses de noviembre de 2019 hasta junio de 2020”, y que “a los efectos de mantener y acrecentar las capacidades, se realizaron ejercicios de entrenamiento y prácticas de tiro con el armamento que fuera llevado en la comisión”.
Aclaró que, ante el clima de violencia en Bolivia, el gobierno del presidente Macri cumplió con su deber de resguardar la Embajada Argentina en La Paz, protección que alcanzó no sólo al embajador y personal diplomático, sino también a dos ministros renunciantes del gobierno de Evo Morales: el ministro de Gobierno, Carlos Romero, y la ministra de Planificación, Mariana Prado.
Dijo que, a efectos de cumplir con tan alta misión, se requirió la presencia del Grupo “Alacrán” de la Gendarmería Nacional argentina, conforme evaluación del director de esa fuerza.
Bullrich remarcó que el grupo especial de la Gendarmería Nacional que viajó a Bolivia en noviembre de 2019, regresó a la Argentina y produjo su informe cuando ya habían transcurrido siete meses del gobierno de Alberto Fernández.
“Desde el traslado de los gendarmes con el material autorizado transcurrió menos de un mes dentro del período restante de gestión del presidente Mauricio Macri, cuyo mandato finalizó el 10 de diciembre de 2019, y siete meses del gobierno que asumió ese mismo día; es decir, el suyo”, se lee en la carta de Bullrich.
Resulta asombroso, agregó, que sólo ahora, “ante una carta (presentada por el canciller Mayta) cuya autenticidad ha sido además desmentida por el supuesto autor, su gobierno se ocupe del asunto”.
La exministra de Seguridad le aclara al presidente argentino que la carta “a causa de la cual usted se apresuró a pedir disculpas está fechada el 13 de noviembre de 2019; es decir, cuando el ex comandante de la Fuerza Aérea Boliviana, Jorge Gonzalo Terceros, ya había renunciado y mal podía entonces enviar en carácter oficial una nota de agradecimiento”.
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