La Paz, 17 de enero (ANF).- Pese a manifestaciones callejeras en contra de nuevas restricciones, países de Europa deciden endurecer sus medidas para contener los contagios de Covid-19, principalmente debido a la variante Ómicron. En esa línea, se impulsa la obligatoriedad en la vacunación.
Y es que hace unas horas, Francia aprobó a través de la Asamblea Nacional una ley para restringir las actividades y accesos a diferentes ligares a quienes aún no se hayan vacunado.
Se trata de un pase de vacunación que sustituye el anterior pasaporte sanitario (que obligaba a tener las vacunas o un test negativo) y que establece la inmunización con las tres dosis o dos más un certificado de curación de Covid-19.
“Con el pasaporte de vacunas, Francia se dota de una nueva herramienta para proteger a sus ciudadanos”, enfatizó el ministro francés de Sanidad, Olivier Véran, tras la aprobación de esta norma.
La expansión de las variantes Delta y Ómiocron en la mayoría de las regiones europeas, ha obligado a tomar medidas para contener los contagios e impulsar a la vacunación, ya que en los últimos días se ha registrado un promedio de 300.000 casos diarios y la mayoría de quienes ingresan a hospitales son personas que no se vacunaron.
Austria es otro de los países que establece normas para que se consolide la vacunación contra el Covid-19 con la obligatoriedad de la inoculación para los adultos.
Desde este 1 de febrero, Austria será el primer país del mundo que obligará a todos sus población adulta a vacunarse con controles estrictos y sanciones a quienes incumplan con multas de entre 600 y 3.600 euros, según la reincidencia.
De igual forma, en Grecia se determinaron multas para las personas mayores de 60 años que no hayan reservado una cita para la inmunización ni siquiera de la primera dosis.
Italia fue de los países europeos que determinaron esta obligación de la vacunación en personas mayores de 50 años desde el pasado 7 de enero.
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