La Paz, 19 de agosto (ANF).- La golpeada isla de Lombok, en Indonesia, volvió a ser sacudida por un fuerte movimiento telúrico este domingo (19.08.2018), sin que inicialmente las autoridades informaran de daños o víctimas. Recordemos que en este mismo lugar ha ocurrido una serie de sismos, el más grave de los cuales dejó al menos 460 muertos a comienzos de este mes.
Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, que registra la actividad sísmica en todo el mundo, el terremoto tuvo una magnitud 6,3 y su hipocentro se localizó a 10 kilómetros de profundidad y a 58 kilómetros al noreste de Mataram, la capital provincial. Sin embargo, la agencia geológica indonesia BNPB elevó a 6,5 la magnitud del sismo, que ocurrió cuatro minutos después de otro temblor de magnitud 5,4 en la misma zona del noroeste de Lombok.
“Iba a entregar ayuda a los evacuados (por el otro sismo) cuando noté que el poste del alumbrado público empezó a balancearse. Ahí me di cuenta de que era un terremoto. La gente empezó a gritar y a llorar. Todo el mundo corría por la calle”, dijo a la agencia AFP Agus Salim sobre un seísmo que se sintió también en la vecina isla de Bali. No se dio alerta de tsunami en esta ocasión.
Seguidilla interminable de sismos
Desde que el pasado 5 de agosto un sismo de magnitud 6,9 provocó serios daños materiales y dejó 460 muertos, se han detectado más de 500 réplicas, incluida una de magnitud 5,9 el día 9. Según el último balance de las autoridades, más de 417.000 personas se vieron desplazadas por esos terremotos que también causaron daños en 72.000 casas, 671 centros educativos, 52 hospitales, clínicas y farmacias y 128 lugares de culto.
Lombok, situada junto a la falla de las Flores, ya había sufrido el 29 de julio el impacto de otro terremoto de 6,4 grados que causó 16 muertos, 355 heridos y 1.500 edificios dañados. Indonesia se asienta sobre el llamado Anillo de Fuego del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica en la que cada año se registran unos 7.000 terremotos, la mayoría moderados. (DW)
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