Procurador General del Estado, Wilfredo Chávez. Foto: Abi
La Paz, 5 de agosto (ANF).- El arzobispo emérito de Sucre, monseñor Jesús Juárez, sugirió este jueves al Procurador general del Estado, Wilfredo Chávez, que sindicó a la Iglesia Católica de ser parte de un supuesto golpe de Estado, callarse y antes de hablar informarse mejor para no quedar mal ni perjudicar a su gobierno.
“Yo creo que lo mejor que puede hacer el Procurador es callarse y hablar con las personas de la Iglesia que le pueden dar la suficiente información, creo que hace más bien callándose que hablando porque sus palabras perjudican al mismo gobierno”, manifestó el religioso.
En una declaración anterior, Chávez solicitó que la cúpula de la Iglesia Católica acuda a declarar ante la Fiscalía por el caso del supuesto golpe de Estado, que promueve el MAS, debido a que estaría comprometida.
Juárez descartó ser convocado por la fiscalía por el mentado caso, debido a que él no tiene nada que ver con ningún golpe. “Yo no voy a ser convocado porque no he hecho nada”, enfatizó.
En junio, la Iglesia Católica reafirmó su rol de mediación en la crisis política y social que afrontó el país en 2019, que derivó en un Gobierno transitorio, y rechazó cualquier intento de relacionarla con un "golpe de Estado", que asegura nunca existió.
“La Iglesia pone siempre lo mejor de su parte y no busca ningún beneficio político ni religioso, nada, solamente servir al pueblo, promoverlo, y sobre todo que sea capaz de juzgar, de hablar por sí mismo y saber denunciar cuando se dicen mentiras, que tenga la capacidad de decir: ‘esto es mentira, la verdad es ésta’”, enfatizó Juárez.
Monseñor pidió mayor responsabilidad y conocimiento de los hechos históricos, y desvincularlos de la ideología para tener una lectura clara sobre lo que ocurrió en octubre-noviembre de 2019.
“Tú no puedes juzgar ideológicamente unos hechos que no corresponden en la actualidad (…), las ideas se discuten con ideas, no con insultos, no con persecuciones”, apuntó.
Juárez enfatizó que la Iglesia siempre ha actuado a solicitud de las partes, para evitar enfrentamientos, derramamiento de sangre y luto en la familia boliviana, por lo que pidió vivir responsablemente “los momentos que nos toca vivir y no le echemos la culpa a nadie, sino que busquemos también la propia responsabilidad que cada uno tiene en esos actos”.
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