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Iglesia

Iglesia: La falta de una justicia independiente socava las bases de la democracia y urge una reforma

Los obispos expresaron su preocupación por la corrupción, que “sigue extendiendo sus tentáculos en instituciones privadas y públicas”.
16 de Abril, 2021
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El presidente de la CEB, Monseñor Ricardo Centellas.
El presidente de la CEB, Monseñor Ricardo Centellas.
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La Paz, 16 de abril (ANF). – Los Obispos de Bolivia, reunidos en la centésima octava Asamblea de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB)emitieron un mensaje, donde señalan que la falta de justicia independiente en territorio nacional “socava” la democracia y exhortaron a realizar una reforma urgente para esclarecer los episodios de violencia y confrontación que se registraron en el país.

“La falta de una justicia independiente socava las bases de la democracia y de la convivencia fraterna y pacífica. Se reconoce, de forma general, la urgencia de la reforma de la justicia en el país”, señala el comunicado.

Los Obispos también se refirieron a la pandemia del coronavirus (Covid-19) que azota a territorio nacional, remarcaron la importancia de agilizar la llegada de vacunas y la inmunización.

“Que las vacunas lleguen lo más antes posible y se intente vacunar a la mayoría. Esta ayuda paliativa tiene que ser pronto, sino la pandemia seguirá azotándonos”, remarcó, El presidente de la CEB, Monseñor Ricardo Centellas.

Agregaron que el sufrimiento en la pandemia pone en evidencia la fragilidad de la condición humana del mundo entero, el dolor por la enfermedad, por la pérdida de seres queridos, por la imposibilidad de despedirse, por el temor al contagio, va acompañado de una crisis general que ha evidenciado las carencias del sistema sanitario y que afecta todas las dimensiones y ámbitos de la persona y de la sociedad.

“A este dolor, se suma la angustia por una creciente polarización política que provoca divisiones y la inestabilidad social, y erosiona nuestras energías en confrontaciones que paralizan la construcción de un proyecto común de país y esperanzador. Esto responde a intereses particulares que, en vez de servir, se sirven del pueblo, ignorando las necesidades reales de la población cada vez más desamparada ante la pandemia y golpeada por la falta de trabajo y la pobreza creciente”, señaló.

En el mensaje, los religiosos recuerdan que los hechos del pasado reciente, que confrontaron y causaron tanto dolor, tantas víctimas. “Han contribuido gravemente a esta situación de tensión. Es el momento de establecer la verdad de lo sucedido, como paso necesario para la reconciliación y restablecer un clima de justicia y paz”.

Argumentaron que es el deber del Estado proporcionar una investigación objetiva e imparcial, y establecer las responsabilidades de todas las partes involucradas. Reafirmamos nuestra solidaridad y cercanía a las víctimas de esos días aciagos y a sus familiares, ya expresada en su momento.

“La tarea de establecer la verdad de lo sucedido involucra directamente a la Administración de la justicia que está llamada a obrar con independencia, transparencia e integridad”, remarcaron.

Otra causa de preocupación es la corrupción, que sigue extendiendo sus tentáculos en instituciones privadas y públicas y que causa graves perjuicios, pobreza e inequidad en nuestra sociedad. La situación es tan grave que ya se está volviendo “cultura” y modo de relacionarnos en todas las esferas.

El presidente de la CEB, Ricardo Centellas, inspirado en la Carta Encíclica del Papa Francisco “Fratelli tutti”, exhortó que es tiempo de apostar por una cultura de encuentro fraterno y de integración.

“Nuestra diversidad cultural no puede ser motivo de confrontación, sino una fortaleza y plataforma para caminar hacia la unidad y encontrar soluciones consensuadas a los problemas comunes”, destacó.

Dijo que la pandemia ha agravado también la situación de pobreza  social que ha puesto de manifiesto la desigualdad y la parcialización en la distribución de los recursos. A este problema, tenemos que responder con espíritu de justicia y de solidaridad y con instrumentos concretos como el Pacto Fiscal, reclamado por tantos sectores y regiones del país, pacto que sostenga una verdadera descentralización económica, expresión auténtica de democracia y oportunidad de vida digna para todos.

/ANF/

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    Conferencia Episcopal de Bolivia