Papa Francisco. Foto: Vaticanocatolico
La Paz, 11 de marzo (ANF).- Ante el problema de la falta de vocaciones sacerdotales que afecta a la Iglesia Católica, el papa Francisco abrió la posibilidad de que hombres casados puedan ordenarse como sacerdotes principalmente para ser enviados a comunidades alejadas.
\"Necesitamos considerar si el \'viri probati\' puede ser una posibilidad\", dijo. \"Si sí, necesitamos determinar qué labores tendrían, por ejemplo, en comunidades remotas\", mencionó en una entrevista concedida al periódico Alemán, Die Zeit.
El Pontífice calificó la falta de sacerdotes que existe en muchas partes del mundo como un problema grande que la Iglesia debe resolver. Ante este panorama, indicó que “el celibato opcional no es la solución”, por lo que se debe reflexionar si los “viri probati” (Hombres probados) son una posibilidad y además ver qué tipo de tareas podrían asumir en comunidades alejadas.
Los viri probati son hombres casados que reciben la ordenación como diáconos, presbíteros u obispos con el compromiso de llevar una vida de continencia total una vez recibidas las sagradas órdenes.
Esta opción permitiría a los hombres ya casados que se ordenen como sacerdotes pero los hombres solteros que ya son sacerdotes no podrían casarse, apuntó.
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