La Paz, 22 de agosto (ANF).- Ante las quemas forestales que afectan a la Chiquitanía, la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) se sumó a las numerosas voces que instan al Gobierno a extremar esfuerzos para sofocar los fuegos y declarar zona de desastre nacional. Asimismo, sugirió no descartar acudir a la ayuda internacional.
“En sintonía con numerosas voces de la sociedad, también nosotros urgimos a las autoridades del Gobierno nacional a extremar esfuerzos para detener este grave problema, con respuestas eficaces y un manejo transparente y responsable de la información (…) En esta línea consideramos que es necesaria la declaración de zona de desastre nacional y que no se excluya incluso el acudir a la ayuda internacional”, establece el comunicado de la CEB, titulado Nuestra Casa Común en Emergencia.
El documento fue leído la mañana de este martes por el secretario General Adjunto de la CEB, Padre José Fuentes. En el mismo se explica que debido a las pérdidas en dos semanas de incendios, considera que las acciones y tiempos empleados no son proporcionales ni adecuados a la magnitud de la tragedia que enfrentamos.
Por ello, expresó su preocupación por las afectaciones en la región amazónica del país, a raíz de los incendios forestales. Aseguró que las pérdidas son incalculables y, en muchos casos, irreparables.
“Numerosas imágenes y testimonios dan cuenta de bosques devastados, animales que han perecido y poblaciones amenazadas. Las consecuencias para la pérdida de la biodiversidad, el daño a la naturaleza, así como para la salud de las personas, son incalculables y, en muchos casos, irreparables”, resalta.
Según los últimos datos del Ministerio de Defensa, los incendios siniestraron 774 mil hectáreas, afectando a 35 comunidades de 11 municipios de la Chiquitanía.
Campaña de solidaridad
Asimismo, la CEB inició una campaña de solidaridad, para recolectar agua, alimentos, medicamentos y aportes económicos para atender a las familias damnificadas y afectadas por los focos de calor.
Esta campaña se realizará a partir de la fecha, a través de la Pastoral Social Cáritas, brazo social de la Iglesia Católica en Bolivia, en los ámbitos nacional, jurisdiccional y parroquial.
Precisó que los aportes económicos serán recibidos en la cuenta corriente en bolivianos del Banco Nacional de Bolivia N° 1000263725, a nombre de Cáritas Boliviana.
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