Plataforma Bolivia libre de transgénicos rechaza resolución de FSUTCPA para liberar cultivos

“Rechazamos  de manera absoluta y enérgica el nuevo intento criminal de las dirigencias corruptas y subordinadas a los mezquinos intereses de los terratenientes empresarios del agronegocio y las transnacionales de la muerte, de introducir cultivos transgénicos de maíz y algodón, que ponen en peligro el patrimonio genético - cultural de las poblaciones indígenas originarias de nuestro país y de todos los bolivianos”, señala el pronunciamiento.

La plataforma que agrupa al Conamag orgánico, la Coordinadora por el Medio Ambiente (Codapma),  al colectivo “Yo soy Semilla” (Los Ángeles), GMO Free (California),  Somos Sur, Consumidoras Conscientes y a la que se adhirieron 30 instituciones académicas, centros de investigación y organizaciones de la sociedad civil advierten entre otros aspectos, que el patrimonio genético - cultural de las poblaciones indígenas originarias está protegido por la Ley 530. 

“El 25 de enero, la FSUTCPA reunida en un ampliado extraordinario promovido por el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), vocero oficial de los intereses empresariales de los grandes terratenientes nacionales y extranjeros del agronegocio, resolvió impulsar la utilización de semillas mejoradas genéticamente de soya, maíz, algodón, arroz, caña de azúcar y otros cultivos propios de la región”, señala el pronunciamiento.

El IBCE defiende la posición que la biotecnología ha ayudado a países de la región a ser más competitivos y productivos en relación a Bolivia, debido a la liberación de cultivos resistentes a diferentes eventos climáticos y plagas.

La plataforma señala que con la falsa  consigna de garantizar la soberanía alimentaria se promueve la introducción de paquetes de semillas transgénicas, comercializadas por las transnacionales, lo cual no tiene nada de soberano, por el contrario, amenazan con sumir en la dependencia y la miseria a todos los pequeños productores agrícolas del oriente boliviano.

“De manera osada e inescrupulosa, solicitan al Presidente boliviano y a los ministros de Desarrollo Rural y Tierras, Medio Ambiente y Agua, Salud, Desarrollo Productivo y Economía Plural, emitan  una norma legal para la creación y funcionamiento del Comité Nacional de Bioseguridad, para que regule la utilización de semillas transgénicas”, señala el documento.

Los firmantes advierten que con la petición, la FSUTCPA está demandante violar la Constitución Política del Estado y las leyes. “Solicitan con ello la legalización de un atentado contra el patrimonio genético cultural de los pueblos, contra la madre tierra y la salud de la población”, señalan. 

A través del pronunciamiento público, la plataforma señala que cultivos como el maíz y el algodón forman parte de las especies nativas más antiguas del continente, teniendo al territorio boliviano como el espacio biocultural ancestral que mayor cantidad de especies nativas cuenta en toda América.

“Instamos al gobierno y a las genuinas organizaciones indígenas y campesinas de Bolivia a defender su patrimonio contra el interés de estos negociantes de nuestra agrobiodiversidad y las corruptas dirigencias campesinas del norte cruceño”, señala el colectivo. 

La Sociedad de Arqueología de La Paz también solicitó el apoyo de la ciudadanía y de todas las entidades académicas y sociales que defienden el patrimonio, a pronunciarse en contra de la aniquilación de este milenario legado.