La Paz, 4 Sep. (ANF).- Marco Antonio Aramayo fue posesionado este miércoles como el nuevo director del Fondo de Desarrollo Para los Pueblos Indígenas, Originarios y Comunidades Campesinas (FDPPIOYCC).
En un acto encabezado por el ministro de Economía, Luis Arce Catacora, ante la ausencia de la titular de Desarrollo Rural y Tierras, Nemesia Achacollo, el nuevo directivo juró al cargo, ante la presencia de representantes de organizaciones como la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob) y la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales de Bolivia.
“El desafío de conducir el Fondo Indígena con sencillez, con humildad, el compromiso que les doy es de trabajar en nuestra casa grande, que es el Fondo Indígena y convertirlo en instrumento liberador de nuestros pueblos”, señaló Aramayo, quien convocó a la unidad de los pueblos indígenas.
Por su parte, el ministro Arce señaló que el objetivo del nuevo director, que proviene de la Cidob dirigida por Melva Hurtado, será administrar de manera eficiente los recursos que se manejan en este Fondo para beneficio de los diferentes pueblos indígenas.
“No administramos pobreza sino recursos del país, destinados a resolver los problemas económicos, productivos de los sectores en otrora marginados como fueron nuestros pueblos indígenas”, señaló Arce.
La posesión del nuevo director se da luego de que decenas de campesinos afiliados al Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (Conamaq) exigieran al Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras explicaciones por la remoción de los directores Daniel Zapata, Epifanio Pacheco y Carlos Paredes, que eran sus representantes en el FDPPIOYCC.
El Conamaq sospecha que la remoción de los directores forma parte de una estrategia del Gobierno para emplear los recursos de este Fondo para la campaña electoral del Movimiento Al Socialismo (MAS) de cara a los comicios del 2014.
El Fondo para los Pueblos Indígenas fue creado mediante el Decreto Supremo 28571 y tiene la finalidad de financiar proyectos de desarrollo productivo y social que beneficien de manera directa a los Pueblos Indígenas, Originarios y Comunidades Campesinas
La fuente de financiamiento para este Fondo proviene del 5% de las recaudaciones del IDH, que deben ser abonados por el Tesoro General de la Nación.
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