La Paz, 17 de marzo (ANF).- El delgado cuerpo de Eva, la pequeña de 12 años que murió de hambre al sufrir un cuadro de desnutrición crónica es velado en la extranca de Senkata en la ciudad de El Alto. El Gobierno anuncia la construcción de una casa y trabajo para Alan, el hijo mayor.
Eva yacía en el colchón cubierta con frazadas, sus padres y hermanos decían que estaba dormía, sin darse cuenta que la niña había fallecido. Ella era parte de una familia de ocho miembros que vivían en un cuarto en la extrema pobreza.
Sus padres y hermanos según informes preliminares también padecían una desnutrición crónica, por esa razón fueron trasladados al hospital de Clínicas. Entre tanto, las autoridades del Gobierno nacional y la Alcaldía Municipal coordinan para coadyuvar con la familia.
La exministra de Justicia y actual delegada de la Oficina de Gestión Social dependiente del Ministerio de la Presidencia, Virginia Velasco, llevó víveres, ropa, frazadas, toallas para apoyar a la familia.
Informó que “por instrucción del presidente Evo Morales se construirá una casa” que les de seguridad, y pidió que el Gobierno Municipal de El Alto pueda gestionar un terreno para este objetivo.
Garantizó que el hermano mayor, Alan, el único que intentaba aportar económicamente al conjunto familiar, tendrá una fuente laboral en alguna entidad pública. “Una vez que la hermana descanse en paz, posteriormente el lunes o martes ya veremos con Alan para ver una fuente de trabajo”, dijo.
Cuando fueron encontrados este jueves, junto al cuerpo de Eva, en la habitación, se encontraba el papá, quien estaba tirado en el suelo, y la mamá descansaba sin fuerzas en el catre, ambos con similar situación de desnutrición. Y con ellos, los cuatro hermanos pequeños de Eva, que solo miraban lo que pasaba. “A pesar de que ella ya estaba sin vida, se le acercaban”, contó la representante de la Defensoría de esa ciudad, Sonia Yujra.
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