La Paz, 20 de diciembre (ANF).- Una investigación periodística realizada en EEUU descubrió que el exministro Carlos Sánchez Berzaín tiene propiedades en el estado de Florida valoradas en nueve millones de dólares. El reporte también señala que su estatus migratorio es poco claro y que el exmandatario Gonzalo Sánchez de Lozada tiene una casa de 1,4 millones en ese país.
Los bienes de Sánchez Berzaín están a su nombre o anotados a nombre de su cuñado o empresas, dice el reporte, realizado por la entidad ProPublica y el Centro de Periodismo Investigativo de la Universidad de Columbia; fue
publicado en diversos medios. “Estados Unidos se ha convertido en un refugio para políticos y acaudalados empresarios sospechosos de corrupción en sus países de origen. Su fortuna e influencia los protegen de ser detenidos”, asegura la investigación. El reporte menciona, entre otros, los casos del expresidente panameño Ricardo Martinelli y el exministro de agricultura colombiano, Andrés Felipe Arias, acusados de corrupción y que residen en EEUU.
El exministro Sánchez Berzaín, que fugó del país en 2003 al caer el Gobierno de Sánchez de Lozada, no respondió a mensajes enviados por ANF a su cuenta de Twitter. Reside en Miami, Florida.
“Documentos muestran que Sánchez Berzaín y su cuñado son personalmente propietarios, o son mencionados como directivos o miembros de empresas que controlan conjuntamente propiedades inmobiliarias en Miami por un valor de unos nueve millones de dólares”, agrega la investigación.
El informe añade que “algunas de las compras de Sánchez Berzaín fueron realizadas a nombre de entidades que parecen mostrar diferentes variaciones del apellido de Berzaín”.
El cuñado del exministro creó la empresa Warren USA Corp en octubre de 2010, por ejemplo, y esa compañía adquirió una residencia el mes siguiente. Y tres semanas después de que la empresa comprara otra propiedad, de elegante estilo español en Key Biscayne, sur de Florida, Sánchez Berzaín “fue añadido a la compañía como secretario”.
En 2011 su cuñado creó otra empresa, Galen KB Corp, y se registró como su presidente. Un mes después, Galen KB Corp compró un condominio de 250.000 dólares. En agosto, Sánchez Berzaín sustituyó a su cuñado como presidente de esa empresa. A la fecha, el exministro no figura como funcionario o propietario de ninguna empresa, señala la investigación.
La práctica de comprar bienes a nombre de empresas de responsabilidad limitada (SRL) es una práctica común y legal que usan los propietarios para lograr privacidad.
Estatus migratorioEn 2006, asegura el reporte, Sánchez Berzaín solicitó asilo político, que recibió en 2007. En su solicitud, a la pregunta “¿Ha sido usted o algún miembro de su familia sindicado, acusado, arrestado, detenido, interrogado, hallado culpable y sentenciado, o encarcelado en algún país que no sea Estados Unidos?”, Sánchez Berzaín marcó la casilla que indicaba “no”, pese a que en ese momento tanto él como Sánchez de Lozada habían sido acusados formalmente de “genocidio” por la Fiscalía General de Bolivia. Las personas que son acusadas en su país de origen no deberían recibir asilo, según la ley de EEUU.
El exministro afirmó en su solicitud de asilo que el Gobierno de EEUU lo ayudó a viajar a Estados Unidos en 2003. Sánchez de Lozada y Sánchez Berzaín viajaron a EEUU tras una oleada de protestas, que dejaron más de 60 muertos, el 17 de octubre de ese año.
Sánchez de LozadaPor su parte, el reporte recuerda que Sánchez de Lozada vive en la acaudalada zona de Chevy Chase, Maryland, en las cercanías de Washington, en una casa de dos plantas que la empresa Macalester Limited compró en 1,4 millones de dólares. Macalester es una compañía de responsabilidad limitada basada en las Islas Vírgenes Británicas y cuya dirección postal está en Bahamas.
El estatus migratorio de Sánchez de Lozada, dice la nota, tampoco está claro. Indicó en una declaración jurada en 2015 que no era ciudadano estadounidense. Su yerno, Mauricio Balcázar, quien habló con ProPublica a nombre suyo, no quiso decir si Sánchez de Lozada está bajo la figura de asilo. Balcázar no quiso dar una opinión al respecto a ANF.
/RPU/
