Ir al contenido principal
Dolar: venta Bs 6,96 | compra Bs 6,86
GIF ANF suscríbete
 

Economía

Poca transparencia de contabilidad amenaza la sostenibilidad de proyectos sociales en Bolivia

Analistas sostienen que la falta de voluntad del gobierno, de transparentar los costos recuperables, responde al descontrol de cuentas y a una decisión política.
21 de Enero, 2016
Compartir en:
Foto: hidrocarburosbolivia.com
Foto: hidrocarburosbolivia.com
Banner Jubileo, abril 22 2024

Por Fernando Cantoral

La Paz, 22 de enero (ANF).- Bolivia es uno de los principales productores y exportadores de gas de Suramérica, pero la poca transparencia que ofrece el gobierno sobre las recaudaciones por la venta del hidrocarburo constituye una amenaza para mejora social del país. 

Este país andino vende a Brasil y Argentina el 75% de gas producido, pero poco se sabe de la eficiencia del manejo de los bienes, que de no ser controlados, podrían afectar drásticamente los proyectos sociales y de asistencia para las poblaciones más necesitadas, dicen expertos. 

Tras 10 años de gestión del actual gobierno y nacionalización de los hidrocarburos, a la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) le falta proveer información detallada sobre el monto que le devuelve a las firmas extranjeras por los gastos de operación e inversiones en la explotación de gas, también conocidos como costos recuperables.

Esta retribución, que puede llegar a cifras millonarias, es el único pago que reciben las compañías extranjeras por su participación en la explotación de hidrocarburos, además de las utilidades. 

Pero de estas cifras no hay información clara y precisa a raíz de la escasa desagregación de los costos, del aumento constante de los gastos de operación por año, y de los diferentes datos que maneja el gobierno, señalan analistas y exautoridades.

La falta de divulgación de los costos recuperables -y las auditorías a los costos- por parte de la petrolera estatal “incentiva la crítica a YPFB que tiene un grave problema de transparencia y denuncias de corrupción”, advirtió el exSuperintendente de Hidrocarburos, Hugo de la Fuente.

La falta de transparencia pone a relucir la posibilidad de que el Estado esté reduciendo los ingresos del país por renta petrolera en favor de cubrir los gastos de las firmas extranjeras. En definitiva, esta situación reduciría los recursos económicos que beneficia los proyectos sociales, y en especial, a los indígenas.

El presidente de la estatal petrolera YPFB Guillermo Achá y su oficina de comunicaciones se han negado en varias ocasiones a comentar o a proveer  información al respecto. 

Una de las consecuencias de la falta de transparencia ha sido, por ejemplo, la corrupción en el Fondo Indígena. Este proyecto fue creado en 2005 por el gobierno nacional para ayudar a los nativos del país, y ha sido alimentado con el 5 por ciento del Impuesto Directo a los Hidrocarburos.

Dirigentes de este proyecto recibieron recursos por al menos 500 millones de dólares ó 3.500 millones de bolivianos del 2005 al 2014, según el secretario de Hacienda de la Gobernación de Santa Cruz, José Luis Parada. La Contraloría detectó, en una primera fase de auditoría, que hubo una pérdida de al menos Bs71 millones para 153 proyectos que nunca fueron ejecutados. Ahora tres de los directores del Fondo Indígena, ahora liquidado, están en la cárcel mientras muchos nativos aún esperan los recursos para la ejecución de sus proyectos. 

Las cifras

Según cálculos del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA) con datos de YPFB, el gobierno entrega el 50% del total de los ingresos en regalías e Impuesto Directo a los Hidrocarburos a los gobiernos subnacionales. El otro 50% lo divide, entregándole alrededor del 15% a las petroleras por costos recuperables y 12% de utilidad neta; el 23% restante representa utilidad para YPFB. 

Desde el 2007 hasta el 2014 YPFB recibió al menos 30 mil 800 millones de dólares por la comercialización de hidrocarburos, de los que pagó a las empresas petroleras 4 mil 800 millones de dólares (15,6%) por concepto de costos recuperables. 

El ministro de Hidrocarburos Luis Alberto Sánchez dijo que desde 2007 “faltan concluir las auditorías a los costos (…) hasta 2012” por lo que no se conoce oficialmente la información del monto reconocido a las petroleras.

El ministro no dio más detalle y se limitó a decir que toda la información se encuentra en el portal web de YPFB; sin embargo, lo poco que había –aún no auditado- fue retirado.

Analistas sostienen que la falta de voluntad del gobierno, de transparentar los costos recuperables, responde al descontrol de cuentas y a una decisión política.

El gobierno con la falta de transparencia respecto a estos costos sólo beneficia a las firmas petroleras porque “esconde lo que realmente YPFB les reconoce como costos de producción”, manifestó Carlos Arce, investigador del CEDLA.

De esta manera, sostuvo, las empresas petroleras consiguen más por el “descontrol” de los costos recuperables.

En 2014 Bolivia tuvo una producción bruta de gas natural de 61 millones de metros cúbicos por día (MMmcd) y exportó 49 MMmcd a los países vecinos, quedándose con 11 MMmcd para el mercado interno. El gobierno recibió 6 mil 100 millones de dólares por la exportación de gas, lo que representó el 51% de las exportaciones totales del país, según el viceministro de Industrialización, Álvaro Arnez. 

El gobierno del presidente Evo Morales apuesta a este rubro para sacar al país del club de los países pobres. Sin embargo, desde inicios de su gestión en el 2006, las empresas petroleras han invertido cuatro veces más en la ampliación de los campos existentes que en nuevos proyectos de exploración, “situación que pone en riesgo la sostenibilidad del negocio de los hidrocarburos”, señaló el experto en hidrocarburos, Hugo del Granado, consultor independiente y exvicepresidente de Administración y Finanzas de YPFB.

Mientras el gobierno, junto a la estatal YPFB, continúe sin transparentar la información de manera detallada sobre los costos recuperables, las sospechas de un mal manejo de los recursos en beneficio a las empresas petroleras seguirán presentes en desmedro del bienestar de la población más necesitada, sostuvo el investigador del CEDLA, Carlos Arce.