La Paz, 12 de febrero (ANF).- Los recolectores de castaña de los bosques de Beni y Pando perdieron aproximadamente el 25% de sus ingresos anuales por la escasez de lluvias que afectó a la última cosecha de diciembre y enero, informó el director general del Centro de Información y Promoción del Campesinado (CIPCA), Lorenzo Soliz.
“Hemos visto afectación en la castaña, se puede hablar de una pérdida del 25% de sus ingresos. Aproximadamente 30 mil zafreros que viven de esta actividad”, sostuvo en una entrevista con ANF.
El fenómeno climatológico de El Niño se manifestó hasta el momento con déficit de precipitaciones en casi todo el país, aunque en los últimos días se registraron lluvias que podrían ayudar a revertir la crítica situación que se vive especialmente en el altiplano, donde escasea el forraje para el ganado camélido.
Sin embargo la afectación a la reciente cosecha de castaña es irreversible, ya que viene del año pasado. “Los efectos reales de la sequía de este año se vivirán en la próxima zafra en diciembre y enero de 2016-2017”, indicó Soliz.
En cada cosecha hay familias que acopian 50 cajas de castaña y otras hasta 150 debido a la diversidad de la zona, explicó el experto. Por cada una de ellas reciben normalmente entre Bs 130 y 150 por unidad, ingresos que este año se verán mermados.
Cipca trabaja con 10 familias campesinas del país en el desarrollo y mejora de sus capacidades productivas. Uno de sus objetivos es lograr que se implementen sistemas agroforestales en la Amazonía, que consisten en la combinación de tres tipos de rubros que dan rendimientos a corto, medio y largo plazo para evitar la dependencia de un solo rubro productivo.
En el primer caso se encuentra la producción de hortalizas, maíz, plátano o yuca, que se puede cosechar en los plazos de un mes, cinco meses y al año de su siembra. A medio plazo se promueve la producción de frutales y cacao. Y a largo plazo los recursos maderables, como el cedro, la mara, cuyo corte se produce a los 40 años de vida del árbol o la castaña que se empieza a cosechar a los 12 años.
“Así tienen la ventaja de poder generar ingresos y alimentos de manera constante desde el tercer mes hasta los 40 años. Ellos dicen no chorrea como quisiéramos, pero gotea sin parar”, expresó Soliz.
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